La moda es la manada; lo interesante es hacer lo que a uno le de la gana.
El instinto de la manada siempre lleva a valorar muy alto lo mediocre. Lo aprecia como algo valioso. Creen que son fuertes porque representan a la mayoría. En las capas medias no existen la sorpresa ni el temor. Se empujan unos contra otros para sentir la ilusión del calor. En la mediocridad nadie puede encontrarse a solas con algo, mucho menos consigo mismo. ¡Y cuan felices parecen! "La pianista" (1983), Elfriede Jelinek
Frases de "La pianista" (1983) Frases de Elfriede Jelinek
Pero incluso los lobos, animales que son, atacan en manada. Igual que cazan ballenas los peces arpón. Si estos animales pueden agruparse para procurarse su sustento, ¿Por qué no los forjados?
¿De qué vive el ser humano? Mientras arrastra madera y revienta piojos con las uñas, su alma humillada se recoge en profundos espacios desconocidos. Observa a los compañeros de prisión como un hombre que se ha caído bajo una manada de lobos y está esperando que lo descubran y lo descuarticen. Pero escucha hacia dentro, se asombra del patético rostro de un muerto, se asombra de un cristal de hielo, respira llenándose la nariz del perfume de los bosques puros y busca, busca las desaparecidas huellas de belleza en su vida, busca de pronto a un compañero que pueda escuchar, y cuando lo encuentra se extasía de pasado, despliega un cuadro ante el otro. Porque tiene que sacarlo a gritos: ¡Soy un ser humano! ¡A mí me respetaban! , le gustaría exclamar. Me amaban, tenía un hogar, una mujer e hijos, tenía amigos. Hice el bien y no exigí ningún agradecimiento a cambio. He visto cosas hermosas, conozco el olor de las ciudades antiguas. Podía haber hecho todo y haber alcanzado todo, si no lo hice, si no lo alcancé, fue sólo porque no sabía, no tenía idea...Quisiera exclamar todo eso, brillar, lucirse, encandilarse sin cesar. No puede, le faltan las palabras, le falta el arte. Pero de eso vive el ser humano, de no haber agotado el sueño de su bella vida perdida, de la libertad y de la pureza del corazón.
Los lobos nunca cazan en solitario, sino siempre en manada. El lobo solitario no es más que un mito. "El mago" (1965), John Fowles
"El mago" (1965) Frases de "El mago" (1965) Frases de John Fowles
Una bruma sucia cubría el horizonte sobre las sombras patéticas de los árboles. Entre la calima gris aparecieron luego las sombras móviles de una manada de búfalos, unos cuarenta o cincuenta ejemplares. (...) La manada se quedó quieta y los búfalos volvieron la mirada hacia nosotros. Olía a estiércol y a la ceniza de la neblina. Los animales más próximos alzaban la cola, alertaban las orejas, erguían la cabeza sobre el poderoso cuello. (...) No eludía mis ojos, al contrario de lo que hacen leones y leopardos, que desvían siempre su mirada a otra parte, como si sintieran un profundo aburrimiento ante la contemplación de un ser tan absurdo como es el hombre. (...) La mirada de aquel búfalo guardaba algo de humana, escondía la conciencia de un ser que sabe a matar y que se siente satisfecho de poder hacerlo.
(...) Son como lobos, y los lobos a menudo cazan en manada. Cada manada tiene un jefe. "Lobos" (2009), Donato Carrisi
"Lobos" (2009) Frases de "Lobos" (2009) Frases de Donato Carrisi
(...) Esta es la juventud, que debía pensar por sí misma -adujo Arévalo-. Piensa y actúa como una manada. -Te equivocas -declaró Rey-. Como una piara. Una piara de cerdos. "Diario de la guerra del cerdo" (1969), Adolfo Bioy Casares
Frases de "Diario de la guerra del cerdo" (1969) Frases de Adolfo Bioy Casares
El ser humano es un animal de manada y necesitamos a la manada a nuestro alrededor, necesitamos tenerla cerca, necesitamos el calor y el tacto de otros seres humanos. "Los vigilantes del faro" (2013), Camilla Läckberg
Frases de "Los vigilantes del faro" (2013) Frases de Camilla Läckberg
Pocos días después, en el Armería, al ir pasando el río, nos volvimos a encontrar con Petronilo Flores. Dimos marcha atrás, pero ya era tarde. Fue como si nos fusilaran. Pedro Zamora pasó por delante haciendo galopar aquel macho barcino y chaparrito que era el mejor animal que yo había conocido. Y detrás de él, nosotros, en manada, agachados sobre el pescuezo de los caballos. De todos modos la matazón fue grande. No me di cuenta de pronto porque me hundí en el río debajo de mi caballo muerto, y la corriente nos arrastró a los dos, lejos, hasta un remanso bajito de agua y lleno de arena. Aquél fue el último agarre que tuvimos con las fuerzas de Petronilo Flores. Después ya no peleamos. Para decir mejor las cosas, ya teníamos algún tiempo sin pelear, sólo de andar huyendo el bulto. "El llano en llamas" (1953), Juan Rulfo
"El llano en llamas" (1953) Frases de "El llano en llamas" (1953) Frases de Juan Rulfo
Tanto el observador como lo observado son parles de un mundo que tiene una existencia objetiva, y cualquier distinción entre ambos no tiene importancia significativa. En otras palabras, si vemos una manada de cebras compitiendo por una plaza en un garaje es porque realmente hay una manada de cebras compitiendo por una plaza en un garaje. "El gran diseño" (2010), Leonard Mlodinow
Frases de "El gran diseño" (2010) Frases de Leonard Mlodinow
Los lobos olerían pronto su sangre. Había una manada con mala fama en aquel bosque, que un noble había alimentado con sus enemigos, acostumbrándolos de esa manera a la carne humana. "Sombras vivas" (2012), Cornelia Funke