No hay duda de que votamos, pero los líderes europeos no cambian las medidas aunque cambien sus caras cada cuatro años. Eso es hipocresía no democracia.
Una Europa económicamente unida, sin conciencia de su misión, no puede convertirse en una potencia mundial como lo fue durante siglos, cuando sí creía en sí misma y en su tarea. "¡Tierra, tierra!" (1972), Sándor Márai
"¡Tierra, tierra!" (1972) Frases de "¡Tierra, tierra!" (1972) Frases de Sándor Márai
La Europa cristiana siempre fue muerte, Karl, muerte y represión. En las colonias puede gozarse de la vida, de la vida y la sensualidad en todas sus formas, sin hacer daño a la Metrópoli, nada que manche sus catedrales, sus blancas estatuas de mármol, sus nobles pensamientos "El arco iris de gravedad" (1973), Thomas Pynchon
"El arco iris de gravedad" (1973) Frases de "El arco iris de gravedad" (1973) Frases de Thomas Pynchon
(...) Y toda la literatura europea es de sufrimiento, nunca de sabiduría.
Nosotros, los europeos, tenemos una tarea específica. La civilización industrial, que hoy abarca el mundo entero, nació en Europa. Podemos decir que todos sus milagros, todas sus contradicciones aterradoras, son consecuencias de una mentalidad inicialmente europea. Por consiguiente, la unificación de Europa debería servir de ejemplo al resto del mundo respecto de cómo encarar los diversos peligros y horrores que hoy nos inundan.
Reflexionamos y soñamos, en las cárceles o fuera de ellas, con una Europa sin alambradas ni altos muros, sin naciones artificialmente divididas, sin gigantescos almacenes de municiones; con una Europa liberada de los esquemas de bloques, con una política europea basada en el respeto del hombre y de sus derechos, que no estuviera subordinada a intereses provisionales ni particulares. Si, soñamos con una Europa como comunidad amistosa de pueblos independientes y Estados democráticos.
En toda Europa se extiende la fiebre de los nacionalismos municipales, el culto de las diversidades no amadas ya como expresiones concretas de lo universal-humano, sino idolatradas como valores absolutos y contrapuestos furiosamente cada uno a los demás.
Han enseñado a la gente a necesitar demasiadas fruslerías. Me temo que el noventa y cinco por ciento de la población de Europa occidental aceptaría la destrucción del planeta a cien años vista si ése fuera el precio de poder seguir teniendo lavadora.
Si Hitler gana, habrá una esclavitud enorme con el nombre: Europa.
De la ciudad subía un rumor grande y lento, donde se mezclaban el rodar de los trenes, el pesado rodar de los carros de madera, la vibración metálica de las carretas que llevan hierro, y algún grito agudo de pregón. - ¡Gran panorama! - dice el consejero con énfasis. Y luego empezó el elogio de la ciudad. Era una de las más bellas de Europa.
Frases de José Maria Eca de Queirós
Europa es un soldado dormido sobre su mochila.
(...) Aunque la Ruta de la Seda es terriblemente fascinante, vuestra Europa es todo un desafío. Encuentro, sin embargo, maravilloso que tenéis estados realmente pequeños que no son capaces, si quiera, de contener su propio nombre.