Divino misterio en estas hojas de otoño que caen sobre los Budhas de piedra.
No es que atardezca es que la lluvia es noche: otoño en la ventana.
Que distinto el otoño para mí que voy para ti que quedas.
Al otoño de mi vida la luna no tiene manchas y sin embargo.
En pleno otoño mi vecino ¿Cómo vive?
Otoño manso, yo me poseo y me inclino ante tus aguas para beber el cielo, suave fuga de árboles y abismos.
La montaña oscurece y asume la púrpura magnificencia de las hojas en otoño.
Otoño nos cita con un son de flautas: vamos a buscarlo por la tarde clara.
Llegó el otoño. El cachorro que no lo sabe es un Buda.
Los sollozos más hondos del violín del otoño son igual que una herida en el alma de congojas extrañas sin final.
Viento de otoño; no hay para mí dioses, no hay budas.
Lluvia de otoño. Las hortensias se deciden por el azul.