No sé muy bien si soy filósofa. Puede que el hecho de que no lo sepa sea un signo de que sí lo soy, pero puede que no. La verdad es que no pienso mucho sobre quién soy en ningún sentido definitivo, de modo que si quiero ser consistente debo resistirme a la pregunta por la identidad. Hay una idea del intelectual comprometido en Francia, como lo eran Sartre o Bourdieu. No me entiendo a mí misma en estos términos. Creo que soy parte de los movimientos sociales sobre los que escribo; mi propia vida fue posible gracias a determinados movimientos, feministas, lesbianos, gays, de derechos civiles. Ellos me formaron. Algunas de las cosas que hago reflejan lo que sucede en estos movimientos y creo que el trabajo intelectual forma parte del movimiento social, pues sin él no funciona.
Hay una soledad común que se extiende de costa a costa. Es como una inconexa crisis de identidad común. Es la oscura, cálida, narcótica noche americana. Sólo espero llegar a palpar ese sentimiento antes de hallarme a mí mismo uno de estos días en la Calle Fácil.
La fotografía es el advenimiento de yo mismo como otro: una disociación ladina de la conciencia de la identidad. "La cámara lúcida: nota sobre la fotografía" (1980), Roland Barthes
"La cámara lúcida: nota sobre la fotografía" (1980) Frases de "La cámara lúcida: nota sobre la fotografía" (1980) Frases de Roland Barthes
Al individuo biológico se agregan los caracteres de unidad, identidad, de continuidad sustanciales. Sólo el hombre desempeña un papel como ser sociable. De aquí la denominación de persona, que significa, precisamente, el desempeñar un papel, como lo desempeñan los actores en el teatro. De la misma manera, en el hombre, como unidad social, desempeña un papel, siempre, en la historia.
La cultura es mucho más que una lengua; y es erróneo basar esa identidad cultural y autonómica en una separación frontal y absoluta respecto de la cultura española.
Los seres tienen una identidad "antes" de la eternidad, antes de la consumación de la historia, antes de que los tiempos sean cumplidos, mientras que aún hay tiempo, implica que los seres existen en relación, pero a partir de sí y no a partir de la totalidad. "Totalidad e infinito: ensayo sobre la exterioridad" (1961), Emmanuel Lévinas
Frases de "Totalidad e infinito: ensayo sobre la exterioridad" (1961) Frases de Emmanuel Lévinas
Necesidad y libertad se comportan como lo inconsciente y lo consciente. Por esa razón, el arte se basa en la identidad de la actividad consciente y la inconsciente.
(...) Lo que yo intento decir en mi propia filosofía es que el amor no se reduce a ninguna de esas tentativas, y que es una construcción de verdad. Y uno se preguntaría: ¿verdad sobre qué? Pues bien, verdad sobre un punto muy particular, a saber: ¿qué es lo que se experimenta a partir de lo Dos y no de lo Uno? ¿Qué es el mundo examinado, practicado y vivido a partir de la diferencia y no de la identidad? Yo pienso que el amor es eso.
[Sobre Dime quién soy] Lo que hago es contar un hecho histórico y coloco los personajes ahí pero no distorsiono la realidad. Por eso se hace un trabajo de documentación previo para que no haya anacronismos y no meter la pata. Quería novelar algunos hechos del siglo XX porque es un siglo que lo acabamos de dejar pero me parece que es uno de los siglos más fascinantes y terribles a la vez. Y sobretodo quería hablar de la identidad de un siglo, de los personajes.
¿Qué hace uno cuando toda su identidad queda destruida en un solo instante? ¿Cómo reacciona uno cuando toda la historia de su vida resulta estar equivocada? "Snuff" (2008), Chuck Palahniuk
Hablé de la memoria, de mis cavilaciones en torno a la identidad, y la memoria, de mi incertidumbre acerca de los límites del mundo exterior.
La identidad es una búsqueda siempre abierta e incluso la obsesiva defensa de los orígenes puede ser en ocasiones una esclavitud tan regresiva como, en otras circunstancias, cómplice rendición al desarraigo.