Conforme fui cumpliendo años descubrí que ni mi cuerpo ni mi alma parecían desesperados por reproducirse. No notaba el menor indicio de estar equipada con el famoso "reloj biológico". En contraste con tantas de mis amigas, cuando veía un niño no me entraban ganas de tener uno propio. (La sensación más parecida me entraba al ver una librería de viejo, cuyos dueños siempre me han dado una sana envidia). "Comprometida" (2010), Elizabeth Gilbert
"Comprometida" (2010) Frases de "Comprometida" (2010) Frases de Elizabeth Gilbert
¡Vaya hombre yo era una especie de mujer cliché! Comparadas conmigo incluso las protagonistas de las comedias de Hollywood eran de lo más original: llevaba años siendo una single, mi reloj biológico me estaba tocando lo que no suena y me bañaba en una piscina de autocompasión: mi gran amor iba a casarse con su gran amor y no era yo. "Yo, mi, me... contigo" (2010), David Safier
Frases de "Yo, mi, me... contigo" (2010) Frases de David Safier
¿Por qué ese beso? Porque sí, y nada más. No somos dueños de nuestro reloj biológico interno. "La delicadeza" (2009), David Foenkinos
"La delicadeza" (2009) Frases de "La delicadeza" (2009) Frases de David Foenkinos
Hay calendarios y relojes para medirlo, pero eso significa poco, porque todos sabemos que, a veces, una hora puede parecernos una eternidad, y otra, en cambio, pasa en un instante; depende de lo que hagamos durante esa hora. "Momo" (1973), Michael Ende
"Momo" (1973) Frases de "Momo" (1973) Frases de Michael Ende