La proporción entre la obra humana y la naturaleza es la misma que media entre el hombre y dios.
El placer que los hombres pueden proporcionar en la conversación no guarda una proporción fija con sus conocimientos o su virtud.
Un hombre es rico en proporción a las cosas que puede desechar. "Walden" (1854), Henry david Thoreau
"Walden" (1854) Frases de "Walden" (1854) Frases de Henry david Thoreau
Entre el genio y el talento existe la proporción del todo con la parte.
La vida se dilata o expande en proporción al propio coraje.
La proporción es la clave de la belleza. "Los pilares de la Tierra" (1989), Ken Follett
Frases de "Los pilares de la Tierra" (1989) Frases de Ken Follett
Los pobres votan en mucha menor proporción que los demás sectores sociales, así que penalizarlos entraña pocos riesgos.
Estamos creciendo en proporción directa a la cantidad de caos que podemos sostener y disipar.
Una pintura es un poema y nada más. Un poema hecho de relaciones entre formas, como otras clases de poemas hechos de relaciones entre palabras, sonidos o ideas. La escultura y la arquitectura son también relaciones entre formas. Esta palabra formas incluye color, tono, proporción, línea, etc.
Frases de José Clemente Orozco
Los monjes hacen un voto de pobreza y la tienda es un templo de consumo, claro. Pero ambos me obligaban a utilizar el material, la luz y la proporción para crear lugares especiales donde sentirse bien o donde acercarse a dios.
La belleza, como tantas otras cualidades que pueden presentarse al conocimiento humano, es relativa; y su definición resulta sin sentido e inútil en proporción a su abstracción. Definir la belleza, si no en los más abstractos, en los más concretos términos posibles para encontrar no su regla universal, pero sí la fórmula que exprese más adecuadamente cualquiera de sus manifestaciones, es la más alta aspiración de los verdaderos estudiosos de estética.
Nuestros sabios han expresado que lo que produce belleza es la proporción de las partes entre ellas y el conjunto, junto con las coloraciones que se le añadan. La belleza entonces se basa en la proporción y las medidas ajustadas, o sea, que el conjunto es el que hace brillar a las partes y no al revés. Ahí tenemos dos buenas pistas: cuando dedicamos tanta energía al culto corporal, estamos fuera de medida, caemos en la desproporción, porque abandonamos otras partes de nosotros mismos. Y sólo va a ser ese conjunto, el todo que somos, el que mostrará belleza o no.