Cada hombre debe tener derecho a elegir su destino.
Todos tenemos un poder especial: la facultad de elegir.
Adivina si puedes, elegir si te atreves.
La libertad de elegir incluye los privilegios que nos singularizan como seres humanos. Además de la autoconciencia, tenemos imaginación (capacidad para ejercer la creación en nuestras mentes, yendo más allá de la realidad presente). Tenemos conciencia moral (una profunda percepción interior de lo que es correcto o incorrecto, de los principios que gobiernan nuestra conducta, y de la medida en que nuestros pensamientos y acciones están en armonía con dichos principios). Y tenemos voluntad independiente (capacidad para actuar sobre la base de nuestra autoconciencia, libres de cualquier otra influencia). "Los siete hábitos de las personas altamente efectivas" (1989), Stephen Covey
"Los siete hábitos de las personas altamente efectivas" (1989) Frases de "Los siete hábitos de las personas altamente efectivas" (1989) Frases de Stephen Covey
Nuestras dotes singularmente humanas nos elevan por encima del mundo animal. La medida en que ejercitamos y desarrollamos esas dotes nos da poder para desplegar nuestro potencial humano. Entre el estímulo y la respuesta está nuestra mayor fuerza: la libertad interior de elegir. "Los siete hábitos de las personas altamente efectivas" (1989), Stephen Covey
"Los siete hábitos de las personas altamente efectivas" (1989) Frases de "Los siete hábitos de las personas altamente efectivas" (1989) Frases de Stephen Covey
Si alguien me preguntara qué tema o cuestión parece tener más impacto en la gente, qué gran idea ha resonado en el alma con más profundidad que cualquier otra, si se me preguntara qué ideal es el más práctico, más importante, más oportuno con independencia de las circunstancias, respondería enseguida, sin ninguna reserva, con la más profunda convicción, de todo corazón y con toda mi alma, que somos libres de elegir. Después de la vida misma, la facultad de elegir es nuestro mayor don. "El 8vo hábito" (2004), Stephen Covey
"El 8vo hábito" (2004) Frases de "El 8vo hábito" (2004) Frases de Stephen Covey
(...) Esta facultad de elegir significa que no somos sólo el producto de nuestro pasado o de nuestros genes; no somos el producto del trato que nos dispensan los demás. Es indudable que influyen en nosotros, pero no nos determinan. Nos determinamos a nosotros mismos por medio de nuestras elecciones. "El 8vo hábito" (2004), Stephen Covey
"El 8vo hábito" (2004) Frases de "El 8vo hábito" (2004) Frases de Stephen Covey
Las especies en peligro sólo sobreviven gracias a nuestro consentimiento. No tienen libertad ni facultad de elegir. Carecen de conciencia de sí mismas. No pueden reinventarse a sí mismas. Están totalmente sometidas al ser humano que, por ser consciente de sí mismo, es el único que tiene libertad y poder para elegir y para reinventarse a sí mismo. "El 8vo hábito" (2004), Stephen Covey
"El 8vo hábito" (2004) Frases de "El 8vo hábito" (2004) Frases de Stephen Covey
Elegimos amar, pero no podemos elegir dejar de amar.
Para el amor, elegir es respetar.
Si todos los países se comprometen a la no intervención en los asuntos internos del otro, los pueblos de los diversos países podrán elegir, según su propia voluntad, su sistema político y su modo de vida.
Bienvenido a la raza humana. Nadie controla su propia vida, Ender. Lo más que puedes hacer es elegir ser controlado por personas buenas, por personas que te quieran.