Nos intoxicamos siempre con el color, con las palabras que hablan del color, y con el sol que hace brillante a los colores.
Incorporé en una orquestación de colores puros todos los sentimientos de los que fui consciente.
Azul es el principio masculino, mixto y espiritual. Amarillo el principio femenino, suave, alegre y sensual. Roja es la materia, brutal y pesada. Siempre se debe combatir el color rojo y vencerlo con los otros dos.
Los colores hablan de ti.
Todos los colores son los amigos de sus vecinos y los amantes de sus opuestos.
Los colores eran para nosotros cartuchos de dinamita.
(...) De Kandinsky me interesan el color y el movimiento; hace el color del movimiento.
El color es el tacto del ojo, la música de los sordos, una palabra en la oscuridad. "Me llamo rojo" (1998), Orhan Pamuk
"Me llamo rojo" (1998) Frases de "Me llamo rojo" (1998) Frases de Orhan Pamuk
El color es un estudio sin fin, porque siempre vas a sentir, como siente todo pintor, que aunque tu último trabajo en representar la belleza del color tuvo defectos, el siguiente podría ser aquel en que la naturaleza te cede alguno de sus secretos.
El color nace con uno, es instintivo, elegí el color para las flores y el paisaje, para mis barcos y mis cielos, para este riachuelo que prolonga mi vida hacia un río de cambiantes tonos. El color nunca muere, y yo entre colores seguiré viviendo, iré prendido a los colores hasta después de muerto.
Frases de Benito Quinquela Martín
El color es un lenguaje que el dibujante utiliza para crear belleza y manipular la atención del lector. Existen colores objetivos y subjetivos; los estados de ánimo de los personajes influyen en el colorido y la luz puede cambiar de un cuadro a otro, según los espacios representados y la hora del día. Hay que estudiar con atención el lenguaje de los colores.
Yo tengo dos paletas, dos coloraciones: una que viene de mi observación de las cosas que se hicieron en la época prehispánica; los colores ahí son limitados, porque no había química, eran colores de tierras, era una cosa muy baja. La otra es la influencia de las frutas; yo viví entre naranjas y plátanos y piñas y eso, claro, se me quedó.