La ciudad (polis) es una de las cosas que existen por naturaleza; y el hombre es, por naturaleza, un animal político.
La ciudad se está desmoronando, no puede durar mucho más; su tiempo ha pasado. Es demasiado vieja...
He muerto muchas veces, acribillado en la ciudad... Pero es mejor ser muerto, que un numero que viene y va.
Es una ciudad extraña, porque cuanto más feo el tiempo, más hermosa la ciudad. Y el más feo de los edificios, es el más coherente de la ciudad.
Comer bien, dormir bien, ir donde se desea, permanecer donde interese, no quejarse nunca y, sobre todo, huir como de la peste de los principales monumentos de la ciudad.
Ya están vestidos, ya se van por la calle. Y es sólo entonces cuando están muertos, cuando están vestidos, que la ciudad los recupera hipócrita y les impone los deberes cotidianos.
La vida moderna exige, y está a la espera de un nuevo tipo de plan, tanto para la casa como para la ciudad.
Mudo. No me encuentro a nadie que me salude ni me diga nada. Soy un extraño en mi Ciudad, mi gran Ciudad de calles polvorientas y enfangadas.
Como un hijo de mi patria creo que es mi deber ayudar a la ciudad de Zagreb en todos los aspectos con mi asesoramiento y trabajo.
Todos nosotros, que vivimos en países cultos densamente poblados y hasta en grandes ciudades, ya ni sabemos qué tan carentes estamos de un general, afable y cálido amor al prójimo. Hay que haber llegado como huésped no invitado a una casa, en un país escasamente poblado, dónde varios kilómetros de malas calles separan a los vecinos entre sí, para poder evaluar qué tan hospitalario y amablemente sociable es el ser humano cuando su capacidad para el contacto social no está constantemente sobre exigida.
Te dices: Me marcharé a otra tierra, otro mar, a una ciudad mucho más bella que lo que esta pudo ser o anhelar (...) ¡Ah! ¿No comprendes que al arruinar tu vida entera en este sitio, la has malogrado en cualquier parte del mundo?
Somos de una ciudad cargada de paciencia, que no conoce el sueño de los invernaderos, ni ha vivido la extraña presencia del amor.
