Cuando hago el bien, me siento bien; cuando hago el mal, me siento mal, y esa es mi religión.
La religión sirve para ayudarnos y consolarnos ante unos problemas que no tendríamos si no existiese la religión.
Nuestra religión es simple: no existen templos ni complicadas filosofías.
¿Cómo se puede tener orden en un estado sin religión? La religión es un formidable medio para tener quieta a la gente.
La religión no es mas que un reflejo fantástico, en las cabezas de los hombres, de los poderes externos que dominan su existencia cotidiana. Un reflejo en el cual las fuerzas terrenas cobran forma de supraterrenas.
La religión tiene por padre a la miseria y por madre a la imaginación.
La religión no mantiene a nadie. Tiene que ser mantenida. No produce trigo ni maíz; no ara la tierra; no derriba bosques. Es una mendiga perpetua. Vive del trabajo de otros, y luego tiene la arrogancia de pretender que ayuda al que da.
El principal objetivo de la religión no es lleva el hombre al cielo sino introducir el cielo en el hombre.
Entiendo por religión, no ya un conjunto de ritos y costumbres, sino lo que está en el origen de todas las religiones, poniéndonos cara a cara con el creador. "Mi religión" (1955), Mahatma Gandhi
"Mi religión" (1955) Frases de "Mi religión" (1955) Frases de Mahatma Gandhi
La religión no admite, no puede admitir, un hombre libre. Solamente acepta el homenaje de los postrados, y desprecia las ofrendas de los que se alzan erguidos.
La religión, oh, sólo otro de esos numerosos errores que resulta de intentar popularizar el arte.
Tenemos la suficiente religión para odiarnos unos a otros, pero no la bastante para amarnos.