
13 frases de El unicornio (The unicorn) de Iris Murdoch... Marian Taylor acepta el empleo de institutriz y llega a un remoto lugar situado en medio de un paisaje terriblemente hermoso y desolado, a un castillo donde el misterio y lo sobrenatural abunda.
Los principales temas, lugares o acontecimientos históricos que destacan en el libro de Iris Murdoch son: búsqueda de la felicidad, búsqueda de la libertad, castillos, destino, devoción, espiritualidad, hechos sobrenaturales, misterio, obligación moral, psicoanálisis, seguir adelante, verdadera felicidad, naturaleza del amor, ficción con institutrices, vanidad, secretos de familia.
Frases de El unicornio Iris Murdoch
01. Todo el mundo aquí parece tener algún extraño secreto.
02. Lo espiritual es antinatural. El alma no puede volar bajo la carga del pecado.
03. Eso, entonces, era el amor: mirar y mirar hasta que uno dejaba de existir.
04. En términos de moral, todos somos prisioneros, pero nuestra cura no es la libertad.
05. Era como en una comedia de Shakespeare. Todas las tramas del relato concluían en armonía.
06. (...) Y gozando de la literatura como solo gozan de ella los que tienen poco más para gozar.
07. Pero una devoción profunda, cualquier devoción profunda, es algo valiosísimo, y pobre del que la desdeñe.
08. (...) Es como si yo hubiera estado todo el tiempo mirando un espejo y siendo apenas consciente del mundo real que tenía al lado.
09. La libertad puede ser un valor en la política, pero no en la moral. La verdad sí. Pero no la libertad. Es una idea absurda, como la felicidad.
10. Nadie debería ser prisionero de los pensamientos de otras personas, el destino de nadie debería ser objeto de fascinación para otros, el destino de nadie debería quedar expuesto a inspección.
11. El arte y el psicoanálisis dan forma y significado a la vida y por eso los adoramos, pero la vida, tal como la vivimos, no tiene forma ni significado, y eso es lo que ahora experimento.
12. Es culpa mía. No pude evitar querer que me ayudaras, pero de un modo indirecto, y al mismo tiempo no te di pistas sobre cómo hacerlo. Te permití soñar. Y por supuesto yo también soy una romántica. Tú eres mi vicio romántico.
13. Fue vuestra creencia en la importancia de mi sufrimiento lo que me hacía seguir adelante. ¡Ah, cómo os necesitaba a todos! Me he servido de vosotros como un vampiro (...) Necesitaba a mi público, he vivido a vuestros ojos como un falso dios. Pero es el castigo del falso dios volverse irreal. Yo me he vuelto irreal.