Frases de La risa

La risa

26 frases de La risa (Le rire) de Henri Bergson... ¿Qué hay en el lenguaje que hace que un chiste sea cómico?, ¿Por qué lo cómico nos hace reír? Una definición del problema de lo cómico en la vida humana.

Los principales temas, lugares o acontecimientos históricos que destacan en el libro de Henri Bergson son: cómico, humor, filosofía, emociones, inteligencia, felicidad, esencia del ser humano, don de la fantasía.

Frases de Henri Bergson

Frases de La risa Henri Bergson

01. Es preciso que cambie a cada momento, porque dejar de transformarse es dejar de vivir.


02. Es cómico todo arreglo de hechos y acontecimientos, que encajados unos en otros nos den la ilusión de la vida y la sensación clara de un ensueño mecánico.


03. El lenguaje conduce a efectos ridículos, se debe únicamente a que es una obra humana, calcada con la mayor exactitud sobre las formas del espíritu humano.


04. Las actitudes, gestos y movimientos del cuerpo humano son risibles en la exacta medida en que este cuerpo nos hace pensar en un simple mecanismo.


05. Recordemos que cuanto hay de serio en la vida arranca de nuestra libertad. Los sentimientos que fuimos madurando en nuestro interior, las pasiones cuyo fuego conservamos, las acciones deliberadas, decididas y ejecutadas por nosotros, todo lo que procede de nosotros y es verdaderamente nuestro, comunica a la vida su desarrollo dramático y generalmente serio.


06. La vida y la sociedad exigen de cada uno de nosotros una atención constantemente despierta, que sepa distinguir los límites de la situación actual, y también cierta elasticidad del cuerpo y del espíritu que nos capacite para adaptarnos a esta situación.


07. Ha de aceptar la ley fundamental de la vida, la de no repetirse nunca.


08. Hay sin duda vicios en los que el alma se hunde profundamente, con toda su fuerza de potencialidad fecunda, llevándolos más intensos, vivificados, a un círculo de eternas transfiguraciones. Esos son los vicios trágicos.


09. La vida exige que percibamos las cosas en la relación que tienen con nuestras necesidades. Vivir es obrar. Vivir es obtener de los objetos impresión útil, y responder a ella por medio de reacciones apropiadas. Las demás impresiones tienen que oscurecerse o llegar a nosotros de un modo confuso. Miro y creo ver, escucho y creo oír, me estudio a mí mismo y creo leer en el fondo de mi corazón. Pero cuanto veo y cuanto oigo del mundo exterior, es simplemente lo que extraen de él mis sentidos para iluminar mi conducta. Lo que conozco de mí mismo es lo que afluye a la superficie, lo que toma parte en la acción.


10. Convendría que estableciésemos una importante distinción entre lo ingenioso y lo cómico. Me inclino a creer que una palabra es cómica cuando nos hace reír de quien la pronuncia, e ingeniosa cuando nos hace reír de un tercero o de nosotros mismos. Pero lo más frecuente es que no podamos afirmar si la palabra es cómica o ingeniosa. Es simplemente risible.


11. Mis sentidos y mi conciencia me aportan solamente una simplificación práctica de la realidad. En la visión que de las cosas y de mí mismo me transmiten, quedan como borradas las diferencias extrañas al hombre, mientras que se acentúan las semejanzas prácticas, y quedan como trazadas de antemano las sendas que mi actividad ha de seguir. Esas vías son aquéllas por donde antes pasó ya la Humanidad entera. Las cosas han sido clasificadas según el partido que de ellas se podrían sacar. Y esta clasificación es lo que yo percibo, más bien que el color y la forma de las cosas. Pero con esto el hombre es ya muy superior al animal. No es verosímil que los ojos del lobo sepan distinguir entre la cabra o un cordero, ni vean en ambos otra cosa que dos presas fáciles igualmente buenas para ser devoradas. Nosotros sabemos distinguir la cabra y el cordero; pero ¿Distinguimos una cabra de otra ni un cordero de otro?


12. Fuera de lo que es propiamente humano, no hay nada cómico. Un paisaje podrá ser bello, sublime, insignificante o feo, pero nunca ridículo. Si reímos a la vista de un animal, será por haber sorprendido en él una actitud o una expresión humana. Nos reímos de un sombrero, no porque el fieltro o la paja de que se compone motiven por sí mismos nuestra risa, sino por la forma que los hombres le dieron, por el capricho humano en que se moldeó.


13. El remedio específico de la vanidad es la risa y que el defecto esencialmente risibles es la vanidad.


14. La risa, algo humillante siempre para quien la motiva, es verdaderamente una especie de broma social pesada.


15. (...) Podría explicarse más exactamente de la risa. Por muy espontánea que se la crea, siempre oculta un prejuicio de asociación y hasta de complicidad con otros rientes efectivos o imaginarios.


16. La sinceridad es comunicativa.


17. La risa castiga ciertas faltas, casi del mismo modo que la enfermedad castiga ciertos excesos.


18. La risa necesita un eco.


19. Lo cómico se dirige a la inteligencia pura: la risa es incompatible con la emoción.


20. No hay mayor enemigo de la risa que la emoción.


21. Muchos han definido al hombre como "un animal que ríe". Habrían podido definirle también como un animal que hace reír, porque si algún otro animal o cualquier cosa inanimada produce la risa, es siempre por su semejanza con el hombre, por la marca impresa por el hombre o por el uso hecho por el hombre.


22. Nuestra risa es siempre la risa de otros.


23. En una sociedad de inteligencias puras quizá no se llorase, pero probablemente se reiría, al paso que entre almas siempre sensibles, concertadas al unísono, en las que todo acontecimiento produjese una resonancia sentimental, no se conocería ni comprendería la risa.


24. El impulso de simpatía que descubrimos en lo cómico es muy pasajero y procede también de una distracción. Es como un padre que, olvidándose de todo, alternara en las travesuras de su hijo, pero que rehaciéndose en seguida procediera a corregirle. La risa es, ante todo, una corrección.


25. La comedia es un juego, pero un juego que imita la vida.


26. La única curación contra la vanidad es la risa.

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