Frases de La mesa limón - 2

19. Era lo que pasaba con las estrellas de cine, que se las apañaban para no envejecer al ritmo normal. Tampoco tenía que ver con la cirugía. De algún modo seguían teniendo la misma edad que tenían cuando las viste por primera vez. Ni siquiera te lo creías del todo cuando empezaban a interpretar a personajes más maduros; seguías viéndolos jóvenes, aunque actuasen en papeles de viejos, y a menudo no eran muy convincentes.


20. El amor podía o no podía producir bondad, gratificar la vanidad y limpiar la piel, pero no conducía a la felicidad; en el amor había siempre una desigualdad de sentimiento o intención. Tal era su naturaleza. Por supuesto, "funcionaba" en el sentido de que era la causa de las emociones más profundas de la vida, y a él le daba la lozanía de una flor de tilo en primavera y le quebraba como a un traidor la rueda de tormento.


21. Es extraño que, a medida que transcurre la vida, los sentimientos dominantes puedan cambiar. Cuando era joven yo respetaba a los curas, honraba a mi familia, estaba lleno de ambición. Respecto a las pasiones del corazón, cuando conocí a la mujer que sería mi esposa descubrí que un largo prólogo de amor desemboca finalmente, con el refrendo y la aprobación de la sociedad, en esos deleites carnales que tanto apreciamos. Ahora que he envejecido estoy menos seguro de que los curas nos muestren el mejor camino hacia Dios; mi familia me exaspera muchas veces y ya no tengo ambiciones.


22. La creatividad ofrece una compensación por la ineptitud del artista para vivir plenamente la vida. Bueno, no es sino un desarrollo de la opinión de Wagner. Wagner sostenía que si gozásemos la vida a fondo no necesitaríamos el arte. A mi entender, lo entienden al revés. No niego, por supuesto, que el artista tiene muchos aspectos neuróticos. ¿Cómo podría negarlo alguien como yo, precisamente? Sin duda soy un neurótico y con frecuencia infeliz, pero esto es en gran medida consecuencia de ser un artista, y no la causa. Cuando aspiramos tan alto y tan a menudo volamos tan bajo, ¿Cómo no va a producir neurosis?


23. Después pensé: ¿Qué sabré yo? ¿Por qué presuponer que mis padres ya no practican -no practicaban- el sexo? Aún dormían en la misma cama hasta que ocurrió esto. ¿Qué sabré yo del sexo a esa edad? Lo cual planteaba la siguiente pregunta: ¿Qué es peor para mi madre: dejar la relación sexual a los sesenta y cinco, pongamos, y descubrir quince años más tarde que su marido se va con una mujer de la edad que ella tenía cuando renunció al sexo, o seguir manteniendo relaciones sexuales con su marido después de medio siglo para acabar descubriendo que él se lo monta por su cuenta? Y después pensé: ¿Y si en realidad no se trata de sexo? ¿Me habría mostrado yo menos escrupuloso si mi padre me hubiera dicho: "No hijo, no es nada físico, es sólo que me he enamorado"?

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