14 frases de La fiesta de la insignificancia (La fête de l'insignifiance) de Milan Kundera... Fragmentos llenos de ironía y reflexiones sobre la vida y la importancia que le damos a las cosas. Con un estilo literario introspectivo, se explorar la idea de que lo insignificante puede tener un profundo significado en nuestras vidas.
Los principales temas, lugares o acontecimientos históricos que destacan en el libro de Milan Kundera son: desprecio, orgullo, inocencia de los niños, sentido de la existencia, soledad, voluntad de vivir, miedo a la soledad, pérdida de la individualidad, erotismo.
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Frases de La fiesta de la insignificancia Milan Kundera
01. Comprendimos desde hace mucho que ya no era posible subvertir el mundo, ni remodelarlo, ni detener su pobre huida hacia delante. Sólo había una resistencia posible: no tomarlo en serio.
02. Y cuidado con el sentido exacto de esa palabra: un Narciso no es un orgulloso. El orgulloso desprecia a los demás. Los subestima. El Narciso los sobrestima porque observa su propia imagen en los ojos de los demás y desea embellecerla. De modo que cuida muy amablemente todos esos espejos.
03. Los niños que ríen, sin saber por qué, ¿Acaso no es hermoso?
04. La uniformidad está en todas partes. Pero en este parque, dispone al menos de una gran variedad de uniformes. Así puedes conservar aún la ilusión de tu individualidad.
05. La insignificancia, amigo mío, es la esencia de la existencia.
06. Pero ¿Cómo definir el erotismo de un hombre (o de una época) que ve la seducción femenina concentrada en mitad del cuerpo, en el ombligo?
07. El placer de la mistificación debía protegeros. Ésa fue de hecho nuestra estrategia, la de todos nosotros. Comprendimos desde hace mucho que ya no era posible subvertir el mundo, ni remodelarlo, ni detener su pobre huida hacia delante. Sólo había una resistencia posible: no tomarlo en serio.
08. En mi vocabulario de descreído, una sola palabra es sagrada: la amistad.
09. Mira a tu alrededor: nadie de los que te rodean está aquí por su voluntad.
10. Que caiga un ángel es sin duda una señal.
11. Quiero estar segura de que entre tú y yo no hay ningún malentendido, que nos entendemos bien tú y yo...
12. ¿No es acaso bonito estar de acuerdo tú y yo? ¿No es acaso bella nuestra alianza?
13. ¿Cuántas veces has llegado ya hasta aquí y te has vuelto a ir?
14. En el cuerpo erótico de la mujer, algunos lugares son excelsos: siempre creí que eran tres: los muslos, las nalgas, los pechos...Y luego un día comprendí que hay que añadirles un cuarto lugar: el ombligo.
