10 frases de Los gritos del pasado (Predikanten) de Camilla Läckberg... Libro de Camilla Läckberg.
Frases de Los gritos del pasado Camilla Läckberg
01. De repente, volvió a abrir los ojos. Algo hizo que la bicicleta se detuviese en seco y lo último que recordaba era la tierra que se le venía encima a toda velocidad.
02. Demasiado tiempo para pensar. Demasiado tiempo para sentir cómo el dolor retorcía cada uno de sus nervios. Tiempo para pensar en todo lo que había perdido... lo que iba a perder.
03. Odio... es una palabra demasiado fuerte que no debe usarse a la ligera. Sí, puede que mi padre no abrigase un sentimiento de excesivo cariño por Johannes, pero, si hubiesen tenido tiempo, estoy seguro de que Dios habría intervenido. Los hermanos no deben estar enfrentados.
04. Nunca la habían acariciado con tanto amor, un amor que la hacía desear su tacto. No el tacto odioso y doloroso que venía después, sino el tacto dulce que lo precedía.
05. Ella veía la ira acumulada, pero estaba convencida de que existía igual cantidad de amor si ella hubiera tenido la capacidad de activarlo...
06. Dinero, fama y más subvenciones y elogios de los superiores: formas absurdas de medir el éxito.
07. Era más fácil enfrentarse al dolor de la certidumbre que al de la espera de lo desconocido.
08. (...) Nunca había comprendido la relación de los hombres con las parrillas. Ellos, que en condiciones normales no dudaban en afirmar que no tenían ni idea de cómo freír un filete en la sartén, se consideraban verdaderos virtuosos a la hora de conseguir que la carne quedase en su punto sobre una parrilla al aire libre.
09. Le resultaba extraño defender al mismo hermano al que, por lo general, no dejaba de criticar, pero la sangre es más espesa que el agua...
10. Era la seguridad que reinaba en su relación, y era maravilloso poder confiar en lo que eso significaba.
