Disfruta de estas 17 frases de "Los cálices vacíos"... Antología que la propia poeta preparó un año antes de su trágica muerte, a manos de su ex esposo convertido en furtivo amante, antes de cumplir los 28 años.
Índice
Los principales temas, lugares o acontecimientos históricos que destacan en las frases y pensamientos de "Los cálices vacíos", de Delmira Agustini son: deseo, espíritu, vida y muerte, paso del tiempo, amante.
Frases de "Los cálices vacíos"
01. Maravilloso nido del vértigo, tu boca!
02. Fiera de amor, yo sufro hambre de corazones.
03. Eros: acaso no sentiste nunca piedad de las estatuas?
04. Maravilloso nido del vértigo, ¡Tu boca! Dos pétalos de rosa abrochando un abismo...
05. Sin sangre, sin calor y sin palpitación...Con la esencia de una sobrehumana pasión!
06. Tu espíritu amanece maravillosamente; Su luz entra en mi alma como el sol a un vergel...
07. ¡Será una noche hermosa!...Tendrá para mí el alma clara y la profundidad del cuerpo de un magnífico amante.
08. Perdón, perdón si peco alguna vez, soñando que me abrazas con alas ¡Todo mío! En el sol...
09. (...) Porque emerge en tu mano bella y fuerte, como en broche de místicos diamantes el más embriagador lis de la muerte.
10. Perenne mi deseo, en el tronco de piedra ha quedado prendido como sangrienta hiedra; Y desde entonces muerdo soñando un corazón.
11. De tus manos, más bellas, fluyen todas las sombras y todas las estrellas, y mi cuerpo se vuelve profundo como un cielo!
12. Pleno sol. Llueve fuego. Tu amor tienta, es la gruta afelpada de musgo, el arroyo, la fruta, la deleitosa fruta madura a toda miel.
13. El triunfo de la noche. De tus manos, más bellas, fluyen todas las sombras y todas las estrellas, y mi cuerpo se vuelve profundo como un cielo.
14. ¿Acaso fué en marco de ilusión, en el profundo espejo del deseo, o fue divina y simplemente en vida que yo te ví velar mi sueño la otra noche?
15. ¡Y cuando, te abrí los ojos como un alma, y vi que te hacías atrás y te envolvías en yo no se que pliegue inmenso de la sombra!
16. Manos enjoyadas del rubí de mi deseo, la perla de mi tristeza y el diamante de mi beso: llevad a la fosa misma un pétalo de mi cuerpo, manos que sois la vida, manos que sois ensueño.
17. ¡Y yo te amo, invierno! Yo te imagino viejo, yo te imagino sabio, con un divino cuerpo de mármol palpitante que arrastra como un manto regio el peso del Tiempo...Invierno, yo te amo y soy la primavera...Yo sonroso, tú nievas: tú porque todo sabes, yo porque todo sueño...
