01. Si el emperador me quiere, que me pague, pues sólo el honor de estar con él no me alcanza.
02. La muerte, para llamarla por su nombre, es la real finalidad de nuestra vida. Por ello es que de unos años a esta parte he hecho relación con esta verdadera amiga del hombre.
03. Dadme el mejor piano de Europa, pero con un auditorio que no quiere o no siente conmigo lo que ejecuto, y perderé todo el gusto por la ejecución.
04. A mi perro Pimperl dele usted una porción de tabaco español, un buen pan y tres besitos.
05. Si te contara todo lo que hago con tu querido retrato te reirías. Por ejemplo, cuando lo saco de su calabozo, le digo: ¡buen día, tesoro! , buen día, buen día; mocosa, pícara, nariz de punta, chichecito.
06. (...) Emperador a Mozart: "Es demasiado hermosa para nuestros oídos, verdaderamente encuentro que hay demasiadas notas". A lo que el compositor repuso: "Exactamente no hay más que las necesarias".
07. Lo más necesario, difícil y principal en la música, es el tiempo.
08. En una ópera, la poesía por fuerza ha de ser hija obediente de la música.
09. La melodía es la esencia de la música.
10. Es un error pensar que la práctica de mi arte se ha vuelto fácil para mí. Le aseguro, querido amigo, nadie estudia tanto como yo.
11. Si Alemania, mi patria querida, de la cual usted sabe me siento orgulloso, no me acepta, entonces debo, en nombre de Dios, quedarme en Francia o Inglaterra y sentirme avergonzado de Alemania como nación.
12. Lo único que me disgusta de Salzburgo, y se lo digo de todo corazón, es que no se pueda establecer ninguna relación social apropiada con esa gente, y que la música no tenga mejor reputación y que el arzobispo no tenga fe en las personas inteligentes que han viajado.