01. Según tu lógica, a Shakespeare habría que meterlo preso por el asesinato del padre de Hamlet. Si el pobre Shakespeare no hubiera escrito la tragedia, seguro que al padre no le pasaba nada. "Los días del arco iris" (2011)
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02. Las escenas vividas en el rústico lecho de Beatriz durante los meses siguientes hicieron sentir a Mario que todo lo gozado hasta entonces era una pálida sinopsis del film, que ahora se ofrecía en la pantalla oficial en Cinerama y technicolor. "Los días del arco iris" (2011)
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03. - Admito que es bueno tu argumento. Pero, aun así, habría otra razón para no aceptar. - Dime. -Pinochet ha bombardeado al país con publicidad durante quince años y a mí me dan sólo quince minutos en televisión. Es como la batalla de David contra Goliat. "Los días del arco iris" (2011)
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04. He oído que te ha dado por la poesía. Dicen que le haces la competencia a Pablo Neruda. Las carcajadas de los pescadores explotaron tan rápidas como el rubor en su piel: se sintió atorado, atarugado, asfixiado, turbado, atrofiado, tosco, zafio, encarnado, escarlata, carmesí, bermejo, bermellón, púrpura, húmedo, abatido, aglutinado, final. Esta vez acudieron palabras a su mente, pero fueron: "Quiero morirme". "Los días del arco iris" (2011)
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05. El ordenador no interfiere con la creatividad así como las piernas no interfieren para caminar.
06. Fantasía más fantasía no puede sino dar algo más fantástico.
07. La palabra es erótica cuando se comunica a niveles emocionales que a veces las ideas o conceptos no tienen.
08. ¡Yo no armaría tanto escándalo por un beso! -Por el beso no, pero el beso es la chispa que arma el incendio.
09. Sé que esta es la primera carta que recibes en tu vida, Mario, y por lo menos tenía que venir dentro de un sobre; si no, no vale.
10. Me interesa enormemente la inclusión, porque parte del trabajo del escritor es traer a la creación a la gente, ofrecerla para que quien la recibe la cree y la recree.
11. Lo que me duele es no poder verla a ella -prosiguió absorto el cartero-. Sus labios de cereza y sus ojos lentos y enlutados, como si se los hubieran hecho la misma noche.
12. Soy un tipo de escritor que tiene un temperamento expansivo y comunicativo. No me es indiferente el receptor de mi obra. Quiero mantener con él un diálogo, quiero interesarlo, quiero provocarlo, quiero entretenerlo. No quiero refugiarme en una intimidad sin transparencia.
