01. Cuando gané la beca y me fui a Europa también llevaba influencias desde aquí, y vinieron otras y otras. Era la etapa de formación, y así sucede siempre. Después viene la etapa de elaboración personal y de afirmación, a partir de todos esos conocimientos, de todas esas experiencias.
02. El surrealismo fue un campo de experimentación para mí, como lo fue el cubismo, si vamos al caso, porque yo estaba abierto a todo (...), lo estudié a fondo, aunque por esos años el cubismo ya había dicho todo lo que tenía para decir, ya había llegado a su cúspide, tanto en Braque, como en Juan Gris y en el mismo Picasso.
03. Mi herramienta y mi praxis es el arte; como artista y ciudadano asumí compromisos con esas luchas y creo haber contribuido a hacer que se tome conciencia de los graves y acuciantes problemas de la explotación, de las condiciones indignas en que deben vivir el trabajador y su familia en la sociedad burguesa y de muchas otras cosas más.
04. Yo les puse nombre y apellido a una multitud de anónimos, desplazados, niños marginados y mujeres humilladas; y los convertí en un símbolo. Los rodeé de la materia en que se desenvolvían sus desventuras, para que de lo sentido brotara el testimonio. En ese testimonio está incluido lo cache, es decir, lo feo, lo cursi, lo que no queda bien, lo incómodo, la triste vulgaridad de lo cotidiano, la ilusión de lo bello reemplazada por un objeto de consumo.
05. (...) Creer que sólo es posible hacer pintura de contenido revolucionario en lo mural y público nos lleva, dentro de nuestra realidad socioeconómica, al oportunismo o a la inactividad. Porque los muros, que pertenecen a los capitalistas, nunca serán entregados para atacar en ellos con imágenes su sistema. Siqueiros mismo no pudo salvarse de esta consecuencia. Su obra final, es una adaptación camuflada de la realidad de México, que dejó de ser revolucionaria.
06. (...) Cuando llegué y me enfrenté con las nuevas tendencias del arte, con el fauvismo, por ejemplo, me di cuenta de que era un nuevo lenguaje del arte que revolucionaba toda una manera de ver anterior; me revolucionaba a mí. La concepción de la forma, la concepción del color, de la composición y todos esos elementos con los cuales se estructura un cuadro, eran completamente nuevos y desconocidos para mí. Al verlos poco a poco, no de golpe, tomé conciencia de que todo lo anterior ya no me servía, que era una herramienta vieja para mí, completamente inútil.
07. (...) O yo continuaba en Europa para seguir una evolución que quién sabe adónde me hubiera llevado, o yo me quedaba acá, conviviendo con la gente y los problemas de mi país e integrado a este mundo y a sus luchas concretas. (...) La lucha se planteará en campos distintos, pero en esencia es la misma. Se trata de un proceso de liberación, problema todavía vigente hoy. Es el problema de la liberación nacional, que es integral, y que comprende, por lo tanto, la liberación de la cultura, de la economía, de la política; en suma, de la liberación nacional en todos sus aspectos.
08. Yo, a Juanito Laguna lo veo y lo siento como arquetipo que es; arquetipo de una realidad argentina y latinoamericana (...) Juanito Laguna no pide limosna, reclama justicia; en consecuencia pone a la gente ante esa disyuntiva; los cretinos compadecerán y harán beneficencia con los Juanitos Laguna; los hombres y mujeres de bien, les harán justicia. De eso se trata. (... ). Los Juanitos Laguna han enriquecido a mucha gente y también a mí; pero yo no los he explotado, yo estoy reivindicándolos. ¿Quiénes han hecho a la Argentina, eh? La masa trabajadora, todo ese pueblo que ha puesto el hombro para hacer un país, con su sacrificio y su trabajo; lo han hecho los Juanitos Laguna que, apenas sus fuerzas se lo permiten, van a trabajar a las fábricas, al campo, donde sea.