28 frases de Fábulas morales de Félix María Samaniego... Fábulas satíricas y mordaces, influenciadas por su educación francesa y por Jean de La Fontaine, siguen conservando su fuera e intemporalidad mensaje.
Los principales temas, lugares o acontecimientos históricos que destacan en el libro de Félix María Samaniego son: fábula, sátira, educación en valores, pedagogía, animales, enseñanza moral.
Frases de Félix María Samaniego Libros de Félix María Samaniego
Frases de Fábulas morales Félix María Samaniego
01. Todo varón prudente, aconseja en el tiempo conveniente; que es hacer de la ciencia vano alarde dar el consejo cuando llega tarde.
02. Es de suma importancia tener en los trabajos tolerancia; pues la impaciencia en la contraria suerte es un mal más amargo que la muerte.
03. Dijo la zorra al busto, después de olerlo: "Tu cabeza es hermosa, pero sin seso". Como éste hay muchos, que aunque parecen hombres, sólo son bustos.
04. Así frecuentemente el hombre se deslumbra con lo hermoso; elige lo aparente, abrazando tal vez lo más dañoso; pero escarmiente ahora en tal cabeza. El útil bien es la mejor belleza.
05. En casa de un cerrajero entró la Serpiente un día, y la insensata mordía en una Lima de acero. Díjole la Lima: "El mal, necia, será para ti; ¿Cómo has de hacer mella en mí, que hago polvos el metal?". Quien pretende sin razón al más fuerte derribar no consigue sino dar coces contra el aguijón.
06. Cierto artífice pintó una lucha, en que valiente un hombre tan solamente a un horrible león venció. Otro león, que el cuadro vio, sin preguntar por su autor, en tono despreciador dijo: "Bien se deja ver que es pintar como querer, y no fue león el pintor".
07. A un panal de rica miel dos mil moscas acudieron, que por golosas murieron, presas de patas en él. Otra dentro de un pastel enterró su golosina. Así, si bien se examina Los humanos corazones perecen en las prisiones del vicio que los domina.
08. ¡Cuántos hay que teniendo lo bastante enriquecerse quieren al instante, abrazando proyectos a veces de tan rápidos efectos que sólo en pocos meses, cuando se contemplaban ya marqueses, contando sus millones, se vieron en la calle sin calzones!
09. A la orilla de un pozo, sobre la fresca yerba, un incauto mancebo dormía a pierna suelta. Gritóle la Fortuna: "Insensato, despierta; ¿No ves que ahogarte puedes, a poco que te muevas? Por ti y otros canallas a veces me motejan, los unos de inconstante, y los otros de adversa. ¡Reveses de Fortuna llamáis a las miserias! ¿Por qué, si son reveses de la conducta necia?".
10. (...) Puede perdonárseme bastante por haber sido el primero en la nación que ha abierto el paso a esta carrera, en que he caminado sin guía, por no haber tenido a bien entrar en ella nuestros célebres poetas castellanos. Dichoso yo si logro que, con la ocasión de corregir mis defectos, dediquen ciertos genios poéticos sus tareas a cultivar éste y otros importantes ramos de instrucción y provecho. Mientras así no lo hagan, habremos de contentarnos con leer sus excelentes églogas, y sacar de sus dulcísimos versos casi tanta melodía como de la mejor música del divino haydn, aunque tal vez no mayor enseñanza ni utilidad.
11. Aunque esta primera prueba me asegura en parte de la utilidad de mi empresa, que es la verdadera recomendación de un escrito, no se contenta con ella mi amor propio. Siguiendo éste su ambiciosa condición, desea que respectivamente logren mis fábulas igual acogida que en los niños en los mayores, y aun si es posible, entre los doctos; pero a la verdad, esto no es tan fácil. Las espinas que dejan de encontrar en ellas los niños las hallarán los que no lo son en los repetidos defectos de la obra. Quizá no parecerán éstos tan de marca, dando aquí una breve noticia del método que he observado en la ejecución de mi asunto, y de las razones que he tenido para seguirle.
12. Un autor moderno, en su Tratado de educación, dice que en toda la colección de Lafontaine no conoce sino cinco o seis fábulas en que brilla con eminencia la sencillez pueril, y aun haciendo análisis de algunas de ellas, encuentra pasajes desproporcionados a la inteligencia de los niños. Esta crítica ha sido para mí una lección. Confesaré sincera? Mente que no he acertado a aprovecharme de ella, si en mi colección no se halla más de la mitad de fábulas que en la claridad V sencillez del estilo no pueda apostárselas a la prosa más trivial. Este me ha parecido el solo medio de acercarme al lenguaje en que debemos enseñar a los muchachos; pero ¿Quién tendrá bastante filosofía para acertar a ponerse en el lugar de éstos, y medir así los grados a que llega la comprensión de un niño?
13. Yo venero tu sentir en esto de no seguir del enemigo el consejo.
14. Es el peor enemigo el que aparenta no poder causar daño, porque intenta, inspirando confianza, asegurar su golpe de venganza.
15. Te juzgarán virtuoso si eres, aunque perverso, poderoso; y aunque bueno, por malo detestable cuando te miran pobre y miserable.
16. Si al evitar los riesgos la razón no nos guía, por huir de un tropiezo, damos mortal caída.
17. Conviene al poderoso para los infelices ser piadoso; tal vez se puede ver necesitado del auxilio de aquel más desdichado.
18. El mérito aparente es digno de desprecio; la virtud solamente es del hombre el ornato verdadero.
19. ¡Cuántas veces resulta de un engaño, contra el engañador el mayor daño!
20. Aparta la amistad de la persona que si te ve en el riesgo te abandona.
21. Quien al poder se acoja de un malvado, será, en vez de feliz, un desdichado.
22. El apetito ciego ¡A cuántos precipita, que por lograr un nada, un todo sacrifican!
23. No anheles impaciente el bien futuro: mira que ni el presente está seguro.
24. Tenga paciencia quien se cree infelice; que aun en la situación más lamentable, es la vida del hombre siempre amable.
25. Nada teme perder quien nada tiene.
26. Quien oye aduladores, nunca espere otro premio.
27. Prestad auxilio si queréis hallarlo.
28. La traición, aun soñada, es detestable.