16 frases de Cancionero y romancero de ausencias de Miguel Hernández... Último poemario, donde compagina la lírica de cancionero con una visión "conflictiva y compleja de su tiempo". Predomina la concisión lingüística y poética.
Frases de Cancionero y romancero de ausencias Miguel Hernández
01. No vale entristecerse. La sombra que te lo ha dado. La sombra que se lo lleve.
02. El mar también elige puertos donde reír como los marineros. El mar de los que son. El mar también elige puertos donde morir. Como los marineros. El mar de los que fueron.
03. Tristes guerras si no es amor la empresa. Tristes. Tristes. Tristes armas si no son las palabras. Tristes. Tristes. Tristes hombres si no mueren de amores. Tristes. Tristes.
04. El número de sangres que el mundo iluminó en dos halló el principio: tú y yo.
05. Desperté de ser niño. Nunca despiertes. Triste llevo la boca. Ríete siempre. Siempre en la cuna, defendiendo la risa pluma por pluma.
06. Cuerpos como un mar voraz, entrechocado, furioso. Solitariamente atados por el amor, por el odio, por las venas surgen hombres, cruzan las ciudades, torvos.
07. Pasó el amor, la luna, entre nosotros y devoró los cuerpos solitarios. Y somos dos fantasmas que se buscan y se encuentran lejanos.
08. El mundo es como aparece ante mis cinco sentidos, y ante los tuyos que son las orillas de los míos.
09. No te asomes a la ventana, que no hay nada en esta casa. Asómate a mi alma.
10. En este campo estuvo el mar. Alguna vez volverá. Si alguna vez una gota roza este campo, este campo siente el recuerdo del mar. Alguna vez volverá.
11. Sangre remota. Remoto cuerpo, dentro de todo: dentro, muy dentro de mis pasiones, de mis deseos.
12. Rumorosas pestañas de los cañaverales. Cayendo sobre el sueño del hombre hasta dejarle el pecho apaciguado y la cabeza suave. Ahogad la voz del arma, que no despierte y salte con el cuchillo de odio que entre sus dientes late. Así, dormido, el hombre toda la tierra vale.
13. Tu puerta tiene una llave que para todos rechina.
14. Entre las flores te fuiste. Entre las flores me quedo.
15. La mujer sin el hombre apagada va. Apagado va el hombre sin luz de mujer.
16. ¿Quién llenará este vacío de cielo desalentado que deja tu cuerpo al mío?