Frases de Tristán Tzara - Página 2

01. Nos hacen falta obras fuertes, rectas, precisas e incomprendidas para siempre.

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02. Te quiero como espera la colina el cuerpo del valle o como la tierra espera la lluvia espesa y fértil.

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03. Mi alma feliz es como nuestro cuarto cálido cuando sé que está nevado y las calles se visten de blanco.

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04. ¡Mírenme bien! soy idiota, soy un farsante, soy un bromista. (...) ¡Soy como todos ustedes!

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05. Frágiles desolaciones aspiradas por la muerte, más allá de las torpes persecuciones del tiempo, la tempestad se deleitaba ante su fin tan próximo.

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06. Estoy aburrido, soy la tierra rotulada en el otoño y la literatura es el gusano que roe el camino subterráneo por donde vendrá el agua para nutrir la cosecha del verano.

+ Frases de Aburrido


07. He sembrado en tu cuerpo, amada, la flor que esparcirá pétalos sobre tu cuello, mejillas y manos y hará brotar mañana tus senos.

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08. De tu cuerpo quisiera levantar palacios, arquitectónicos jardines y terrenales paraísos monumentales.

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Tristán Tzara

Tristán Tzara
  • 16 de abril de 1896
  • Moinesti, Bacau, Rumanía
  • 25 de diciembre de 1963
  • París, Francia

Poeta y ensayista rumano, fundador del movimiento dadaísta.

Sobre Tristán Tzara

Tristán Tzara nació como Samuel Rosenstock en una familia judía que tenía una empresa forestal.

En 1904 se trasladó a Bucarest, capital de Rumania, donde estudió en el colegio "Schemitz-Tierin".

Tiempo más tarde, cuando tenía 16 años, Tristán Tzara junto a varios amigos editaron "Simbolul" (el símbolo), un magazine de arte, entre octubre y diciembre de 1912.

Dos años más tarde, Tristán Tzara se matricula en la Universidad de Bucarest para estudiar Matemáticas y Filosofía, pero no termina la carrera.

En plena Primera Guerra Mundial (1914-1918), se declaro abiertamente pacifista y en el otoño de 1915 se traslado hacia Zürich, una ciudad neutral de Suiza.

En 1916 fundó junto con Marcel Janco, Hugo Ball, richard Huelsenbeck y Jean Arp, el movimiento Dadaísta y más tarde en París (Francia) lo materializó en el primer "Manifiesto dadá" (1918).

Estando en París, participó de la publicación "Littérature", donde conoció a varios poetas, entre ellos a André Bretón, que luego impulsarían el Surrealismo.

En 1936 se afilió al Partido Comunista Francés y durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), Tristán Tzara se incorporó a la resistencia francesa.

Terminada la guerra, su poesía tomó un giro más intimista y reflexivo, aunque mantuvo siempre la espontaneidad e imágenes ilógicas que caracterizaron su obra.

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