01. El hecho de que la improvisación se pierde en el aire nos hace apreciar que cada momento de la vida es único... Un beso, un atardecer, una danza, un chiste. Ninguno volverá a repetirse de la misma manera. Cada uno sucede una sola vez en la historia del universo.
02. Una vida creativa es una cuestión riesgosa. Seguir el propio curso, no trazado por los padres, por nuestros pares o por las instituciones, implica un delicado equilibrio de tradición y libertad personal, un delicado equilibrio de ser fiel a uno mismo y permanecer abierto al cambio.
03. La mano derecha y la izquierda son una pareja bien avenida que, como el hombre y la mujer, son simétricas y complementarias. Derecha e izquierda, violín y arco, hombre y mujer, música y silencio; las parejas bailan, se combinan, luchan, se mezclan, se fusionan, se separan.
04. La preparación específica comienza cuando entro en el "temenos", el espacio de juego. En el pensamiento de la antigua Grecia, el "temenos" es un círculo mágico, un espacio sagrado delimitado dentro del cual se aplican reglas especiales y donde pueden suceder libremente acontecimientos extraordinarios.
05. (...) Sin el juego el aprendizaje y la evolución son imposibles. El trabajo creativo es juego; es especulación libre usando los materiales de la forma que uno ha elegido. La mente creativa juega con los objetos que ama.
06. Hay una diferencia gigantesca entre los proyectos que imaginamos realizar o planeamos hacer y los que realmente llevamos a cabo. Es como la diferencia entre un romance fantaseado y uno en que realmente nos encontramos con otro ser humano con todas sus complejidades.
07. Un improvisador no actúa a partir de un vacío sin forma, sino a partir de tres billones de años de evolución orgánica; todo lo que fuimos está de alguna manera codificado en algún lugar de nuestro ser.
08. La inspiración y la creatividad brillan en la interfaz entre lo consciente y lo inconsciente. La creatividad implica un intercambio de material que se sumerge en el inconsciente a través de la práctica y emerge del inconsciente como un mensaje sorprendente.
09. Cualquiera que desee expresar significado con símbolos y palabras, con música, pintura, debe encontrar cierto placer en las tareas imposibles, poseer la voluntad de tolerar una gran frustración, un toque de quijote.
10. Un ser que juega es más fácilmente adaptable a los contextos y las condiciones cambiantes. El juego como improvisación libre agudiza nuestra capacidad de enfrentar un mundo en cambio.
11. Escribir, tocar un instrumento, componer, pintar; leer, escuchar, mirar... todo exige que nos sometamos a ser transportados por Eros, a una transformación del yo similar a la que ocurre cuando nos enamoramos.
12. La fórmula para la creación es simple. Basta identificar nuestros impedimentos y desembarazarnos de ellos, como dejamos en el suelo una maleta sobrecargada que hemos estado llevando desde hace demasiado tiempo.