01. Podríamos decir que la democracia no es tanto el poder del pueblo como el poder del ciudadano, de cada ciudadano. De ahí que la democracia liberal no pueda ser separada del pluralismo. El núcleo social de la democracia no es una masa compacta y homogénea, sino una multiplicidad de fuerzas que interactúan.
02. En la democracia nadie tiene el derecho de comerse todo el pastel. La regla de la mayoría, que constituye un principio democrático fundamental, ha de ser matizada mediante la regla de la mayoría limitada. La mayoría y sólo la mayoría deben decidir, pero no puede decidir la exclusión de las minorías.
03. El sistema presidencial controla el poder dividiéndolo. Para evitar el despotismo dispone que la maquinaria gubernamental se mueva mediante la acción de dos motores que se controlan mutuamente. Así se evita tanto la dictadura del Ejecutivo como el despotismo del Congreso. La base del arreglo es la independencia de los órganos del poder.
04. Por otra parte me importa repetir que el hombre económico es una ficción, de igual manera que el hombre religioso, psicológico o biológico. El hombre es todo eso al mismo tiempo y mucho más. Todo hombre es muchos hombres y a la vez un todo integral.
05. Todo hombre aspira a mejorar sus condiciones de existencia con repetida terquedad. No importa que fracase una y muchas veces. Hay un veneno de esperanza, inagotable y recóndito que nace en algún rincón de la conciencia y fluye silenciosamente hasta invadirla con ancho cauce reparador.
06. (...) Han intentado condensar en una píldora la esencia de la democracia. Pero ésta es escurridiza. Tratar de atenuar la complejidad de este edificio no hace más que empobrecer nuestra comprensión de la vida democrática. Y, con ello, se empobrece nuestra propia existencia.
07. A través del principio de ciudadanía, el poder es descentralizado en una serie de agentes sociales. En la democracia, el ciudadano convive con otros; sus intereses y sus proyectos tendrán que convivir con otros intereses y otros proyectos. La diversidad es la energía democrática.
08. El patriotismo no es ditirambo sino crítica constructiva. Se descubren los errores para que no se repitan, se señalan los vivios para corregirlos y las llagas para curarlas. El patriotismo es en esencia amor admirativo y anhelo apasionado de superación.
09. (...) Nosotros debemos defendernos, defender nuestra tradición cultural en lo que tiene de valioso, debemos vaciarnos en moldes propios, sin que por supuesto, nos neguemos a aceptar corrientes ideológicas de fuera, cuando ellas se adapten a nuestra realidad y sean ventajosas para nuestro desenvolvimiento.
10. La ciudadanía no es silvestre. Es individualidad cuya armazón son normas. La sociedad democrática requiere de un sólido tejido normativo que garantice los derechos políticos de los ciudadanos y establezca las llamadas "reglas del juego político".
11. (...) Pero no es lo mismo reconocer que las matemáticas son herramientas útiles y aún indispensables al economista, que sostener que la Economía es una ciencia matemática porque se ocupa de cantidades.
12. A lo largo de la historia se han ensayado diversos mecanismos para mantener a raya al despotismo. (...) El establecimiento de un orden normativo que da forma institucional al Estado y limita los poderes del gobierno.