Frases de Elena Garro

01. Aquí la ilusión se paga con la vida. "Los recuerdos del porvenir" (1963)

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02. Hay que ser pobre para entender al pobre. "Los recuerdos del porvenir" (1963)

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03. En la profundidad de la mentira siempre hay algo perverso. "La casa junto al río" (1983)

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04. Para nosotros, los indios, es el tiempo infinito de callar. "Los recuerdos del porvenir" (1963)

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05. Adelante de los pasos de un hombre siempre van los pasos de una mujer. "Los recuerdos del porvenir" (1963)

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06. Quisiera no tener memoria o convertirme en el piadoso polvo para escapar a la condena de mirarme. "Reencuentro de personajes" (1982)

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07. No todos los hombres alcanzan la perfección de morir; hay muertos y hay cadáverres, y yo seré un cadáver. "Los recuerdos del porvenir" (1963)

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08. Sí, rica, sí, el dinero lava la sangre, no hay ideales, no hay nada, sólo hay dinero empapado de sangre... "La casa junto al río" (1983)

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09. Era difícil sumergirse de pronto en el enigmático lenguaje marxista; se diría que hablaban un idioma cifrado. "Memorias de España 1937" (1992)

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10. La veo, me veo y me transfiguro en multitud de colores y de tiempos. Estoy y estuve en muchos ojos. De la memoria que de mí se tenga. "Los recuerdos del porvenir" (1963)

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11. La memoria del futuro es válida, pero me ha fastidiado, y estoy cambiando los finales de todos mis cuentos y novelas inéditos para modificar mi porvenir.

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12. Él sabía que el porvenir era un retroceder veloz hacía la muerte y la muerte el estado perfecto, el momento precioso en que el hombre recuperaba plenamente su otra memoria. "Los recuerdos del porvenir" (1963)

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Autores relacionados

Elena Poniatowska Guadalupe Amor José Emilio Pacheco Octavio Paz Rosario Castellanos

Elena Garro

Elena Garro
  • 11 de diciembre de 1916
  • Puebla de Zaragoza, Puebla, México
  • 23 de agosto de 1998
  • Ciudad de México, México

Escritora, novelista y dramaturga mexicana, autora de "Un hogar sólido" (1958), "Los recuerdos del porvenir" (1963), "La semana de colores" (1964), "La casa junto al río" (1983) y "La culpa es de los tlaxcaltecas" (1987).

Sobre Elena Garro

Elena Garro nació en la ciudad de Puebla de Zaragoza, siendo hija de padre español y madre mexicana y se crió en la Ciudad de México.

Durante la Guerra Cristera (1926-1929), la familia se trasladó a la ciudad histórica de Iguala de la Independencia (estado de Guerrero), donde realizó sus primeros estudios.

En la década de 1930 volvió a la Ciudad de México para estudiar literatura, coreografía y teatro en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y comienza a trabajar como coreógrafa y actriz en el Teatro Universitario.

En 1935 conoció a Octavio Paz, con quien se casó en 1937 y realizó junto a él un viaje a España que duró un año, dejando testimonio de sus vivencias en "Memorias de España 1937" (1992).

Un año antes de divorciarse (1959), publica "Un hogar sólido" (1958), donde reúne sus primeras obras teatrales y junta y evoca varias realidades.

En 1963 aparece "Los recuerdos del porvenir", novela que habla sobre un episodio de la guerra cristera y rompe violentamente la continuidad del realismo mexicano, manejando el tema del poder desde un ángulo político y fantástico a la vez.

Tras unas declaraciones sobre la masacre de Tlatelolco (1968), la comunidad intelectual mexicana comenzó a rechazarla, lo que le llevó al exilio primero en Estados Unidos y España, luego en Francia durante veinte años.

En 1980 aparece el libro de cuentos "Andamos huyendo Lola", donde abunda un clima de persecución, y en el que aparece, de manera obsesiva y biográfica la figura de su hija Elena.

En 1987 publicó "La culpa es de los tlaxcaltecas", donde amalgama el tiempo presente y el pasado, la realidad y la ficción hasta llegar al punto donde lo fantástico es lo real y la realidad desaparece.

De vuelta en México, se instaló en Cuernavaca y tiempo después se trasladó a la Ciudad de México para seguir un tratamiento contra el cáncer de pulmón, que finalmente la llevó a la muerte.

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