01. El colmo de la infelicidad oscila entre el estreñimiento y asistir sin ganas a una reunión mundana.
02. Mi retorno a casa me produjo un júbilo estético imposible de describir (...) Fue como si hubiese vuelto a nacer.
03. Mi estilo nació como un niño, en un instante; con la diferencia de que a ese nacimiento le había precedido un atribulado embarazo de 35 años.
04. El mismo año que terminé el mural de la Escuela Nacional Preparatoria di uno de los pasos más importantes de mi vida, me hice miembro del Partido Comunista.
05. Has de saber, mi niña, que en mi acumulador de amor hay energía suficiente (...), sin que deje de parecerme que hace apenas cinco minutos que te encontré y comencé a quererte.
06. Yo respeto todas las religiones. Me interesan extraordinariamente en el mismo plano y por análogas razones con que respeto todas las enfermedades y me intereso extraordinariamente en su curación.
07. Dicen mis amigos que mi corazón es un multifamiliar. Por mi parte, creo que el mandato "amaos los unos a los otros" no indica limitación numérica de ninguna especie sino que antes bien, abarca a la humanidad entera.
08. ¿Las mujeres que he amado? Tuve la suerte de amar a la mujer más maravillosa que he conocido. Ella fue la poesía misma y el genio mismo. Desgraciadamente no supe amarla a ella sola, pues he sido siempre incapaz de amar a una sola mujer.
09. El primer boceto que realicé me dejó admirado. ¡Era realmente bueno! Desde entonces trabajaba confiado y satisfecho. Había desaparecido la duda interior, el conflicto que tanto me atormentaba en Europa. Pintaba con la misma naturalidad con que respiraba, hablaba o sudaba.
10. Riendo alegremente, me cogió de la mano y me llevó por toda la casa, que parecía estar vacía, hasta su cuarto. Hizo desfilar ante mí todas sus pinturas. Estas, su cuarto y su chispeante presencia me llenaron de una alegría maravillosa. No lo sabía yo entonces, pero Frida ya se había vuelto lo más importante de mi vida.
11. Cuando entré en el cuarto para verla, su rostro se veía tranquilo y más hermoso que nunca. La noche anterior me había dado un anillo que había comprado de regalo por nuestros veinticinco años de casados, para cuyo aniversario faltaban todavía diecisiete días. Le pregunté por qué me lo daba tan anticipadamente y me respondió: -Porque siento que te voy a dejar muy pronto. Pero aunque sabía que se iba a morir, debe de haber estado luchado por la vida. De otro modo, ¿Por qué habría de haberse visto obligada la muerte a sorprenderla robándole el aliento mientras dormía?
12. (...) Así fue como en 1939 Frida se fue a París y lo conquistó. Cuando más rigurosos eran los críticos, mayor era su entusiasmo. El elogio de dos personas en especial doró la aureola de la felicidad de Frida. Uno fue Vasily Kandinsky, probablemente el más grande precursor del abstraccionismo moderno; el otro fue Marcel Duchamp, uno de los maestros del expresionismo abstracto. Kandinsky quedó tan conmovido con las pinturas de Frida, que delante de todos, en la sala de la exposición, la alzó en brazos y la besó en las mejillas y los párpados mientras corrían por su rostro lágrimas de conmovida emoción.