En el mundo de THX 1138, la humanidad ha creado sociedades subterráneas donde todo es controlado por el estado.
Los habitantes de estas ciudades son controlados por fuertes drogas que cumplen la función de inhibidores de la conducta y catalizadores.
La sociedad está basada en el consumo desmedido y el estado, personificado por Om (una pintura del rostro de Jesucristo), controla a todos las personas.
THX es seducido por su compañera de cuarto, LUH, que le retira la medicación para permitirle sentir y mantienen relaciones sexuales, algo prohibido.
THX es condenado y comparte la celda con SEN por un tiempo, hasta que logran escapar y trata de encontrar a LUH.
¿Podrá hallarla antes de que lo atrapen nuevamente? ¿Logrará ser libre?