Frases de Tu cerebro y la música

Tu cerebro y la música

51 frases de Tu cerebro y la música (This is your brain on music: the science of a human obsession) de Daniel Levitin... ¿Por qué la música despierta distintos estados de ánimo? ¿Es el placer musical diferente de otro tipo de placer? ¿Por qué estamos tan emocionalmente unidos a la música que escuchábamos cuando éramos adolescentes?.

Los principales temas, lugares o acontecimientos históricos que destacan en el libro de Daniel Levitin son: neurociencia, ciencia cognitiva, funcionamiento del cerebro, música, aprender música, teoría musical, divulgación científica.

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Frases de Tu cerebro y la música Daniel Levitin

01. En general, es en los períodos en los que nos sentimos aburridos cuando buscamos nuevas experiencias.


02. La novedad musical atrae la atención y vence el aburrimiento, lo que la hace más recordable.


03. El equilibrio entre simplicidad y complejidad en la música influye también en nuestras preferencias. Estudios científicos sobre lo que nos gusta y lo que no nos gusta en una diversidad de dominios estéticos (pintura, poesía, danza y música) han demostrado que existe una relación metódica entre la complejidad de una obra artística y lo que nos gusta. Por supuesto, la complejidad es un concepto totalmente subjetivo. Para que la idea tenga algún sentido, tenemos que aceptar que lo que le parece de una complejidad impenetrable a un individuo podría corresponder al "punto dulce" de preferencia de otro. Asimismo, lo que a una persona le parece soso y de una simplicidad odiosa, a otra podría parecerle difícil de entender, debido a diferencias de formación, experiencia, interpretación y esquemas cognitivos.


04. La gente de éxito ha tenido, en general, muchos más fracasos que la gente que no llega a alcanzarlo.


05. Hacen falta diez mil horas de práctica para alcanzar el nivel de maestría asociado con ser un experto a escala mundial... En cualquier cosa.


06. El poder del arte consiste en que puede conectarnos entre nosotros, y con verdades más amplias sobre lo que significa estar vivo y lo que significa ser humano.


07. El esquema enmarca nuestra percepción, nuestro procesamiento cognitivo y en último término nuestra experiencia de la realidad.


08. La historia de lo que hace tu cerebro cuando oye música es la historia de una orquestación exquisita de regiones cerebrales, en la que participan las zonas más antiguas y más recientes del cerebro humano, regiones tan apartadas como el cerebelo, situado en la parte de atrás de la cabeza, y los lóbulos frontales, justo detrás de los ojos. Se trata de una coreografía precisa de liberación y respuesta neuroquímicas entre sistemas lógicos de predicción y sistemas emotivos de recompensa. Cuando nos gusta una pieza de música, nos recuerda otra música que hemos oído, y eso activa huellas mnemotécnicas de períodos emotivos de nuestras vidas. La relación entre tu cerebro y la música consiste toda ella, (...), en conexiones.


09. Ahora que los intérpretes en solitario de música y de radio por Internet se están haciendo más populares, creo que veremos emisoras de música personalizadas en pocos años, en las que todo el mundo pueda tener su emisora de radio personal, controlada por algoritmos informáticos que nos proporcione una mezcla de música que ya conocemos y que nos gusta, y una mezcla de música que no conocemos pero que es probable que nos guste. Creo que será importante que cualquiera que sea la forma que adopte esta tecnología, los oyentes puedan tener un mando de "aventurerismo" que puedan apagar y que controle la mezcla de lo viejo y lo nuevo, o lo lejos que esté la nueva música de lo que normalmente escucha.


10. La maestría musical es algo más que técnica estricta. Oír música y disfrutar de ella, la memoria musical y cómo se relaciona con la música una persona son también aspectos de una mente musical y una personalidad musical. Deberíamos adoptar el enfoque más inclusivo posible en la identificación de la musicalidad, para no excluir a aquellos que, aunque musicales en el sentido amplio, tal vez no lo sean en un sentido técnico y estricto. Muchas de nuestras mentes musicales más preclaras no eran considerados expertos en un sentido técnico. Irving Berlin, uno de los compositores de más éxito del siglo XX , era un mal instrumentista y apenas sabía tocar el piano.


11. Mozart no empezó a componer hasta los seis años de edad, y no escribió su primera sinfonía hasta los ocho. De todos modos, es excepcional, por decir poco, el que compusiese una sinfonía a los ocho años. Mozart demostró precocidad a una edad muy temprana. Pero eso no es lo mismo que ser un experto. Hay muchos niños que componen música, y algunos llegan a componer obras de envergadura con sólo ocho años de edad. Y Mozart estuvo sometido a una instrucción exhaustiva por parte de su padre, al que se consideraba generalmente en la época el mejor profesor de música de toda Europa.


12. La mejor hipótesis que tienen los científicos actualmente sobre el papel de los genes y del entorno en las conductas cognitivas complejas es que cada uno es responsable de aproximadamente el 50 por ciento de la historia. Los genes pueden transmitir una propensión a ser paciente, a tener una buena coordinación ojo-mano, o a ser apasionado, pero ciertos acontecimientos de la vida (acontecimientos de la vida en el sentido más amplio, no sólo tus experiencias y recuerdos conscientes, sino cómo te alimentaste y cómo se alimentó tu madre mientras estabas en su vientre) pueden influir en que una propensión genética se materialice o no.


13. El fracaso es inevitable y a veces se produce al azar. Lo importante es lo que haces después del fracaso. La gente de éxito es constante y persistente. No abandonan.


14. Los instrumentos musicales figuran entre los artefactos más antiguos fabricados por el hombre que se han encontrado.... La música precede a la agricultura en la historia de la especie.


15. Gran parte de la investigación sobre pericia musical ha buscado los logros en el lugar equivocado, en la facilidad de los dedos más que en la expresividad de la emoción.


16. La música pudo ser la actividad que preparó a nuestros ancestros prehumanos para la comunicación verbal y para la propia flexibilidad cognitiva y de representación necesaria para convertirse en humanos.


17. Un budín sólo tiene gusto cuando yo lo meto en la boca, cuando entra en contacto con la lengua. No tiene gusto ni sabor cuando está en la nevera, sólo el potencial.


18. Las preferencias comienzan con la exposición y cada uno de nosotros tiene su propio cociente de "aventurerismo" sobre cuánto estamos dispuestos a alejarnos en un momento dado de nuestra zona de seguridad musical.


19. La memoria para interpretar una pieza musical entraña un proceso muy parecido al de escuchar música..., a través de establecer esquemas estándar y expectación. Además, los músicos utilizan el troceo, una forma de organizar información parecida a cómo organizan la información los ajedrecistas, los atletas y otros expertos. "Trocear" consiste en un proceso de ligar unidades de información en grupos, y recordar el grupo como un todo en vez de las piezas individuales.


20. Cuando una pieza musical es demasiado simple tiende a no gustarnos, nos parece trivial. Cuando es demasiado compleja, tiende también a no gustarnos, nos parece imprevisible: no percibimos que esté asentada en algo familiar. La música, como toda forma artística en realidad, tiene que lograr para que nos guste el equilibrio justo entre sencillez y complejidad. La sencillez y la complejidad se relacionan con la familiaridad y familiaridad es una palabra que equivale a esquema.


21. El cerebro utiliza claves sobre el espectro del sonido y el tipo de ecos para decirnos cosas sobre el mundo auditivo circundante, igual que un ratón utiliza sus bigotes para saber cosas sobre el mundo físico que lo rodea. Los ingenieros de grabación han aprendido a remedar esas claves para imbuir las grabaciones de una cualidad semejante a la vida, al mundo real, aunque se hagan en estudios asépticos.


22. La música parece remedar algunos rasgos del lenguaje y transmitir algunas de las mismas emociones que transmite la comunicación vocal, pero de un modo no referencial y no específico. Activa también algunas de las mismas regiones neuronales que activa el lenguaje, pero la música aprovecha mucho más que el lenguaje estructuras del cerebro primitivo que participan en la motivación, la recompensa y la emoción.


23. Según los mejores cálculos hace falta un mínimo de cincuenta mil años para que aparezca en el genoma humano una adaptación. A esto se le llama lapso evolutivo: el lapso temporal entre la primera aparición de una adaptación en una pequeña proporción de individuos y el momento en que pasa a distribuirse ampliamente en la población.


24. (...) Pero Miller y su colega Martie Haselton, de la Universidad de California, en Los Ángeles, han demostrado que la creatividad derrota a la riqueza, al menos en las hembras humanas. Su hipótesis es que mientras que la riqueza predice que tendremos un buen papá (para la crianza de los niños), la creatividad predice mejor quién proporcionará los mejores genes (para engendrar hijos).


25. Vivir una larga vida, aunque sea feliz y productiva, no es algo que se transmita en los genes. Un organismo necesita reproducirse para transmitir sus genes. El nombre del juego evolucionista es reproducirse a toda costa, y procurar que los propios vástagos vivan para hacer lo mismo, y para que sus vástagos vivan lo suficiente para hacer lo mismo y así sucesivamente.


26. La neuroplasticidad es la capacidad del cerebro para reorganizarse. Aunque en los últimos cinco años ha habido algunas demostraciones impresionantes de reorganización cerebral que no se consideraban posibles, el grado de reorganización que puede producirse en la mayoría de los adultos es muchísimo menor de la que puede producirse en los niños y en los adolescentes.


27. Los genes que existen en ti hoy (con excepción de un pequeño número que pueden haber mutado) son los que se reprodujeron con éxito en el pasado. Cada uno de nosotros es un vencedor en una carrera de armamentos genética; muchos genes que no consiguieron reproducirse con éxito murieron, sin dejar descendientes.


28. Cosmides y Tooby sostienen que la función de la música en el niño en desarrollo es ayudar a preparar su mente para una serie de actividades sociales y cognitivas complejas, ejercitando el cerebro de manera que esté preparado para las exigencias que le plantean el lenguaje y la interacción social.


29. El ritmo agita el cuerpo. La tonalidad y la melodía agitan el cerebro. La agrupación de ritmo y melodía tiende un puente entre el cerebelo (el control motriz, el pequeño cerebro primitivo) y el córtex central (la parte más evolucionada y más humana del cerebro).


30. Los estudios de violinistas de Thomas Elbert han demostrado que la región del cerebro responsable del movimiento de la mano izquierda (la mano a la que se exige la máxima precisión al tocar el violín) aumenta de tamaño como consecuencia de la práctica.


31. La música se ha convertido en una actividad de espectador sólo en los últimos quinientos años: la idea de un concierto musical en el que una clase de "expertos" actuaba para una audiencia apreciativa es algo completamente desconocido a lo largo de nuestra historia como especie.


32. Lo que la mayoría de nosotros buscamos en la música es una experiencia emotiva. No estamos estudiando la interpretación en busca de notas equivocadas y, mientras éstas no nos saquen de nuestro ensueño, la mayoría de nosotros ni siquiera las advertimos.

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