
19 frases de Romper el hechizo (Breaking the Spell: Religion as a Natural Phenomenon) de Daniel Dennett... Libro de Daniel Dennett.
Frases de Romper el hechizo Daniel Dennett
01. Si puede acercarse a las complejidades del mundo, tanto a sus glorias como a sus horrores, con una actitud de humilde curiosidad, y reconocer que, no importa cuan profundo lo haya visto -si acaso, apenas rasguñando la superficie-, encontrará entonces mundos dentro de mundos, bellezas que hasta entonces no había podido imaginar, y sus preocupaciones mundanas se reducirán a un tamaño adecuado, no muy importante cuando se contrastan con el gran esquema de las cosas.
02. Debo enfatizar este punto para mantener a raya a los bien intencionados pero desacertados multiculturalistas: las entidades teóricas en las que estas poblaciones tribales francamente creen - los dioses y otros espíritus- no existen. Estas personas están equivocadas, y usted lo sabe tan bien como yo. Es posible que personas sumamente inteligentes tengan una teoría muy útil pero equivocada, y no tenemos que pretender lo contrario para demostrar respeto por estas personas ni por sus costumbres.
03. No hay ninguna sociedad humana sin alguna tradición musical.
04. ¿Por qué no hay ninguna otra especie que tenga arte? De nuevo, la respuesta más sugerente -lo cual no significa que esté probada, sino sólo que es muy posible que pueda probarse- es que, al carecer de lenguaje, las otras especies carecen de las herramientas para crear combinaciones sucedáneas de estímulos y, por lo tanto, carecen de una perspectiva que les permita la exploración de las combinaciones de sus propios sentidos.
05. La ignorancia no es algo vergonzoso; lo que es vergonzoso es imponer ignorancia.
06. Uno de los descubrimientos más sorprendentes de la psicología moderna reveló cuan fácilmente se puede ser ignorante en lo que respecta a nuestra propia ignorancia.
07. ¿Quién puede serle leal a un Dios al que no puede pedírsele nada? No tiene que ser maná del cielo. Como dijo alguna vez el comediante Emo Phillips: "Cuando era niño, solía implorarle a Dios por una bicicleta. Pero luego me di cuenta de que Dios no obra de ese modo - ¡Así que robé una bicicleta e imploré por su perdón!".
08. El precio es sólo un factor en cualquier intercambio; la calidad es otro, y combinados producen una estimación del valor.
09. Vale la pena recordar a los valientes pioneros a quienes les tomó varios años superar el poderoso tabú en contra de la disección de cadáveres humanos durante los primeros años de la medicina moderna. Y debemos señalar que, a pesar de la indignación y la repulsión con las que la idea de la disección fue recibida entonces, haber superado esa tradición no nos ha conducido al temido colapso de la moralidad y la decencia. Vivimos en una era en la que los cadáveres humanos todavía son tratados con el debido respeto; de hecho, con más respeto y decoro que en la época en la que la disección aún gozaba de mala fama.
10. Al igual que otras muchas maravillas naturales, en cierta medida la mente humana es una bolsa de trucos, armada un poco a la carrera, a lo largo de miles de años, por el proceso, ciego y carente de prospección, de la evolución por selección natural.
11. Las invenciones que no puedan clasificarse inmediatamente porque son demasiado absurdas no logran resistir en la competencia por conseguir la atención, mientras que aquellas que son demasiado sosas simplemente no son lo suficientemente interesantes.
12. Gracias a la tecnología, lo que casi cualquier persona puede hacer se ha multiplicado mil veces, pero nuestra comprensión moral acerca de lo que debemos hacer no ha mantenido el mismo ritmo (Dennett, 1986,1988). Uno puede tener un bebé de probeta, o tomar una pildora anticonceptiva de emergencia para evitar tener un hijo; uno puede satisfacer sus urgencias sexuales en la privacidad de su habitación descargando pornografía de Internet y puede copiar su música favorita gratis en lugar de comprarla; puede mantener su dinero en cuentas secretas en el exterior y comprar títulos en compañías de cigarrillos que explotan a países pobres del tercer mundo; puede instalar minas terrestres, contrabandear armas nucleares, producir gas nervioso y lanzar "bombas inteligentes" con enorme precisión. También puede disponer que cien dólares de su cuenta bancaria se utilicen mensualmente para proporcionar educación a diez niñas de un país islámico, que de otra manera no aprenderían a leer o escribir; o para favorecer a cien personas desnutridas; o para proveer cuidado médico a pacientes con SIDA en África. Puede utilizar Internet para organizar un monitoreo por parte de los ciudadanos de los peligros ambientales, o para supervisar la honestidad y el trabajo de los gobernantes -o para espiar a sus vecinos-. Entonces, ¿Qué debemos hacer?
13. Las personas que quieren estudiar la religión usualmente tienen algún interés creado. O bien quieren defender de sus críticos a su religión favorita o bien quieren demostrar la irracionalidad y la futilidad de la religión, lo que tiende a infectar sus métodos con algún sesgo.
14. Sólo hay una manera de respetar la sustancia de cualquier edicto moral supuestamente dictaminado por dios: considerarlo concienzudamente a la luz de la razón, utilizando toda la evidencia de que dispongamos. Ningún dios que se contente con muestras de amor irracional es digno de adoración.
15. Las personas religiosas, y que creen que la religión es la mejor esperanza para la humanidad, no pueden, sensatamente, esperar que los que somos escépticos al respecto nos abstengamos de expresar nuestras dudas si ellas mismas no están dispuestas a poner sus convicciones bajo el microscopio.
16. Cuanto más haya invertido usted en una religión, más motivado estará para proteger esa inversión.
17. ¿Por qué la gente se une a grupos? Porque quieren. ¿Pero por qué quieren? Por muchas razones, incluidas las más obvias: por protección mutua y seguridad económica, para promover la eficiencia en la cosecha y en otras actividades necesarias, para lograr proyectos de gran escala que de otro modo serían imposibles. Pero, por sí misma, la utilidad manifiesta de estos arreglos grupales no explica cómo fue que llegaron a darse, pues no sólo existen barreras que hay que sortear, en forma de miedo mutuo y de hostilidad, sino que siempre acechará la posibilidad de la defección oportunista o de la traición.
18. Nuestra capacidad para dedicar nuestras vidas a algo que consideramos más importante que nuestro propio bienestar personal -más importante incluso que nuestro imperativo biológico de engendrar descendencia- es una de las cosas que nos diferencian del resto de los animales.
19. Las grandes ideas de la religión han mantenido a los seres humanos cautivados durante miles de años, mucho más que el tiempo registrado por la historia, aunque no más que un pequeño instante en el tiempo biológico.