01. La gente busca la felicidad como un borracho busca su casa, sabe que existe pero no la encuentra.
+ Frases de Búsqueda de la felicidad
02. El ateísmo es el vicio de unas pocas personas inteligentes.
03. Desde tales hasta los más quiméricos charlatanes no hubo ningún filósofo que influyese ni siquiera en las costumbres de la calle donde vivía.
04. Cuando la naturaleza formo nuestra especie, nos dio unos cuantos instintos, el amor propio para nuestra conservación, la benevolencia para la conservación de los otros, el amor que es común con todas las demás especies y el don inexplicable de combinar mas ideas que todos los demás animales juntos; después de habernos dado así nuestro lote, nos dijo: "ahora, arreglaros como podáis".
05. Francia es quizá de todos los países el que más ha unido la crueldad con lo ridículo. No hay tribunal en Francia que no haya hecho quemar a muchos magos. Había en la antigua Roma locos que creían ser brujos, pero no encontraron bárbaros que los quemasen.
06. Ingenio, superstición, ateísmo, mascaradas, versos, traiciones, devociones, venenos, asesinatos, unos cuantos grandes hombres, un número infinito de canallas hábiles y sin embargo desdichados: he aquí lo que fue Italia.
07. Cada hombre, en el fondo de su corazón, tiene derecho a creerse enteramente igual a los demás hombres; de ello no se desprende que el cocinero de un cardenal deba ordenar a su amo que le haga la cena; pero el cocinero puede decir: "Soy hombre como mi amo; he nacido llorando como él; él morirá como yo entre las mismas angustias y las mismas ceremonias. Los dos tenemos las mismas funciones animales. Si los turcos se apoderan de Roma, y entonces yo me convierto en cardenal y mi amo en cocinero, lo tomaré a mi servicio".
08. El único placer de la vida en Ginebra es que allí cada cual puede morir como le dé la gana. Hay mucha gente decente que ni siquiera llama al cura.
09. La teología me divierte: la locura del espíritu humano se muestra allí en toda su plenitud.
10. Un capuchino decía: "¡Qué sabio ha sido Dios poniendo la muerte después de la vida! Porque si la hubiera puesto antes, no hubiéramos tenido tiempo para hacer penitencias".
11. Un hombre preocupado por el bien público, por la humanidad, por la verdadera religión, ha publicado, en uno de sus escritos a favor de la inocencia, que los tribunales cristianos han condenado a muerte a más de cien mil pretendidos brujos. Si juntamos a esas masacres jurídicas el número infinitamente mayor de herejes inmolados, esta parte del mundo no parecerá más que un vasto cadalso cubierto de verdugos y de víctimas, rodeado de jueces, esbirros y espectadores.
+ Frases de Verdadera religión
12. Creo que el ateísmo es tan pernicioso como la superstición.