Frases de Salman Rushdie
Los pensamientos fueron ordenadas por el año de publicación de sus obras.
- 1981. Hijos de la medianoche
- 1988. Los versos satánicos
- 1990. Harún y el mar de las historias
- 1994. Este, oeste
- 2001. Furia
- 2008. La encantadora de Florencia
Hijos de la medianoche (1981)
Historia sobre todos aquellos que nacen y viven en medio de ninguna parte o el paso de la India colonial al país independiente, a través de Saleem Sinai, y se ambienta en el contexto de acontecimientos históricos reales y con ficción histórica.
01. Lo real y lo cierto no son necesariamente una misma cosa.
02. Todo tiene una forma, si se busca. No es posible escapar a la forma.
03. Las cosas -incluso la gente- se filtran unas en otras como los sabores cuando cocinas.
04. Aprendí: la primera lección de mi vida: que nadie puede mirar al mundo con los ojos todo el tiempo abiertos.
05. El lenguaje se desvanecía, siendo sustituido por formas de pensamiento universalmente inteligibles que iban mucho más allá de las palabras...
06. Todos le debemos una vida a la muerte.
07. En esta guerra se tiraron bombas reales e imaginarias.
08. Para comprender una vida, tienes que tragarte al mundo.
09. Para comprender una sola vida, tenéis que tragaros el mundo.
10. Lo reconozco: más que a cualquier otra cosa temo al absurdo.
11. Lo que se da mejor en el calor: la fantasía; la insensatez, la lujuria.
12. La mayoría de las cosas que importan en nuestras vidas ocurren en nuestra ausencia.
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Los versos satánicos (1988)
Tres historias. Dos sobrevivientes con extraños cambios en sus cuerpos. Una bella joven con una nube de mariposas que la siguen y un comerciante que se convierte en profeta. Realismo mágico en cada fragmento de esta obra.
01. Las grandes caídas cambian a la gente.
02. Si lo viejo se resiste a morir, lo nuevo no podrá nacer.
03. Las apariencias engañan, no hay que juzgar el libro por las tapas.
04. Cuando el hechizo entra por la puerta, el sentido común sale por la ventana.
05. No hay cosa más amarga para el hombre que descubrir que ha estado creyendo en un fantasma.
06. El verdadero atractivo del mal es la seductora facilidad con la que uno puede aventurarse por semejante camino.
07. Quien calla otorga.
08. El olvido es seguridad.
09. La vida hiere a los vivos.
10. Con la muerte llega la sinceridad.
11. Donde no hay credo no hay blasfemia.
12. Nadie renuncia a la tierra sin pelear.
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Harún y el mar de las historias (1990)
Encantadora fábula llena de magia acerca del poder de la imaginación... Las mágicas historias de Rashid Khalifa llevan la alegría al triste país de Alifbay. Pero un día sucede algo terrible y se le agotan las historias... ¿Cómo recupera el don?.
01. - ¿Esos nombres quieren decir algo? - Todos los nombres quieren decir algo.
02. Siempre me pareció que contar cuentos es también una especie de malabarismo.
03. No me gusta pensar que todos los hermosos cuentos del mundo se echen a perder para siempre jamás.
04. Es el Amor. Todo es por Amor. Y el Amor es algo maravilloso y arrogante. Pero tiene mucho de atolondrado.
05. La Necesidad es un ave rara: hace que la gente falte a la verdad. Todos la sienten, pero no todos reconocen sentirla.
06. Nada sale de la nada...No hay cuento que surja del aire; los cuentos nuevos nacen de los viejos (son las nuevas combinaciones las que los hacen nuevos).
07. ¿Has visto África? ¿No? Entonces, ¿Existe de verdad? ¿Y los submarinos? ¿Eh?
08. Bueno, señores, yo les diría: la necesidad es una serpiente muy escurridiza.
09. El hielo negro de la sombría fortaleza recibió la luz del sol como una herida mortal.
10. (...) Como digo, no empecé a creer en el Océano hasta hace poco, pero quizá no sea tarde para hacer algo.
11. Y aquí hemos venido a buscar un atajo, supresión de trámites burocráticos, la forma de evitar el papeleo.
12. Él sabía lo que sabía: que el mundo real está lleno de magia, por lo que es fácil que los mundos mágicos se hagan realidad.
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Este, oeste (1994)
Nueve relatos tocan diversos temas cohesionados por dos hilos secretos: la escurridiza relación entre ficción y realidad y la tragicómica dualidad de pertenecer o no pertenecer a una cultura.
01. Un buen consejo es más raro que un rubí.
02. Y se rió. Era la primera risa auténticamente alegre que le había oído desde que su esposa murió.
03. Los extranjeros no saben estar en su sitio (que han dejado atrás). Si se les da tiempo, empiezan a pensar que son nuestros iguales.
04. Su existencia entre nosotros nos recuerda que hay sitios en que (por difícil que sea aceptarlo), también a nosotros se nos consideraría extranjeros.
05. La viuda del ladrón tuviera las garras clavadas en él, pero el muchacho era inocente, un verdadero pollino, no se puede enseñar nada a gente así.
06. Tal vez yo podría incluso entrechocar tres veces los tacones y conquistar nuevamente su corazón murmurando, en suave recuerdo de nuestro desperdiciado amor, no hay nada como el hogar.
07. Yo también tengo lazos alrededor del cuello, los tengo hasta hoy, tirando de mí hacia aquí y hacia allá, Oriente y Occidente, y los nudos se aprietan ordenándome: elige, elige. Doy saltos, resoplo, relincho, reculo, coceo. Lazos, reatas, no elijo a ninguno de los dos, y elijo a los dos. ¿Lo oís? Me niego a elegir.
08. Nosotros, el público, nos ofendemos fácil, mortalmente. Hemos llegado a considerar la ofensa como un derecho fundamental. Valoramos muy pocas cosas más que nuestra rabia, que, en nuestra opinión, nos da un alto soporte moral. Desde ese alto soporte podemos disparar contra nuestros enemigos, causando muchas bajas. Nos enorgullecemos de nuestra escasa tolerancia. Nuestra cólera nos eleva, nos trasciende.
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Furia (2001)
El ímpetu nos empuja a nuestras alturas más nobles y a nuestras profundidades más bajas... Una investigación profundamente inquietante del lado más oscuro de la naturaleza humana y de la sociedad opulenta.
01. (...) Hacía mejores las cosas. Te mostraba el camino. No era parte del problema. Resolvía cosas.
02. Hay un montón de cosas en juego: tus raíces desenterradas tiran mucho. Tu deseo paradójico de ser parte de lo que dejaste.
03. Las cosas parecían proseguir con lógica, según las leyes de la verosimilitud psicológica y las profundas coherencias internas de la vida metropolitana, pero de hecho todo era un misterio.
04. Tienes que ser un poco más flexible, solo un poquito más, ¿De acuerdo? Deja entrar de vez en cuando a otras personas en tu círculo mágico. Sigues siendo el mago, pero deja que todos jueguen a veces con las varitas.
05. ¿Qué clase de regalo de Navidad le pediría Jesús a Santa Claus?
06. Traspasaba todas las barreras de idioma, raza y clase. Se convertía, variadamente, en amante o confidente o modelo de sus admiradores.
07. Vivir en Metrópolis era saber que lo excepcional era tan comente como un refresco sin calorías, que la anormalidad era la norma de palomitas de maíz.
08. Sé que, cuando la gente se separa, emplea normalmente la incomprensión como arma, agarrando deliberadamente el palo por donde no debe y empalándose en la punta para probar la perfidia del otro.
09. Bailas alrededor cuando lo que tienes que hacer es mirarla de frente, mirarla a la cara. Vamos a hablar de la ira, ¿De acuerdo? De esa maldita furia que realmente mata. Dime, ¿Dónde se engendra el asesinato?
10. En alguna parte, en los programas informáticos, había un virus, una deficiencia potencialmente letal. Nada que no fuera la desyoización del yo serviría. Si pudiera limpiar el ordenador entero, quizá el virus acabase también en la basura. Después de aquello, quizá podría comenzar a construir un hombre nuevo.
11. La vida es furia, pensó él. La furia -sexual, edípica, política, mágica, brutal nos empuja a nuestras alturas más nobles y a nuestras profundidades más bajas. De la furia vienen la creación, la inspiración, la originalidad, la pasión, pero también la violencia, el dolor, la pura destrucción sin miedo, el dar y recibir golpes de los que nunca nos recuperamos. Las Furias nos persiguen; Shiva danza, su furiosa danza para crear y también para destruir. ¡Pero olvídate de los dioses! Sara despotricando contra él representaba al espíritu humano en su forma más pura y menos socializada. Eso es lo que somos, lo que nos civilizamos para disfrazar: el aterrador animal humano que llevamos dentro, el exaltado, trascendente, autodestructivo y desenfrenado señor de la creación.
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La encantadora de Florencia (2008)
Fragmentos de una encantadora historia... A finales del siglo XVI, un extranjero llega a la corte de Akbar el Grande, emperador del Imperio mongol. Es el portador de un secreto que podría proporcionarle la mayor de las fortunas o costarle la vida.
01. Nuestras vidas son vidas de fábula y extremos.
02. (...) Resultaba ser ese accidente feliz: un mito necesario.
03. ¿Por qué borrar lo excepcional solo para que lo distinguido pareciese mejor de lo que era?
04. La maldición de la raza humana no es que seamos tan distintos unos de otros, sino que seamos tan parecidos.
05. Si el poder era un grito, las vidas humanas se vivían en el eco de los gritos de los demás. El eco de los poderosos ensordecía a los desvalidos.
06. Sin agua, nada somos. Hasta un emperador, privado de agua, se vería pronto reducido a polvo. El agua es el auténtico monarca y todos somos sus esclavos.
07. El ruido es vida, y el exceso de ruido es señal de que la vida es buena. Ya tendremos tiempo de guardar silencio cuando estemos muertos y libres de todo mal.
08. Nosotros somos el sueño de ellos (...), y ellos son el nuestro.
09. Esa bien podría ser la maldición de la especie humana -respondió Mogor-. No que seamos tan distintos unos de otros, sino que seamos tan parecidos.
10. La brujería no requiere pociones, espíritus familiares ni varitas mágicas. Con un pico de oro, el uso del lenguaje permite encantamientos de sobra.
11. El calor del día arreciaba. Sin el lago, la ciudad era un cascarón reseco y encogido. El agua siguió menguando. La muerte del lago era también la muerte de Sikri.
12. Había adquirido las lenguas del mismo modo que los marineros adquirían las enfermedades; las lenguas eran su gonorrea, su sífilis, su escorbuto, su paludismo, su peste.