Frases de Paul Feval
- 1858. El jorobado
- 1865. La vampira
- 1867. La ciudad vampiro
El jorobado (1858)

01. ¿Qué es la dicha, sino un pretexto para vivir? El jorobado
02. -Escuchadme bien. Yo no soy vuestra esclava. Me agrada estar acompañada y la soledad me espanta. Me gusta el ruido, la vida, y el silencio me hiela la sangre. Necesito para vivir la luz, el movimiento y el placer. La alegría me atrae, la risa me embriaga, la música me encanta. El vino de Rota hace relampaguear como diamantes mis ojos, y cuando la sonrisa frunce mis labios, conozco que soy más hermosa. - ¡Qué loca más encantadora! El jorobado
03. Desde que soy fuerte, sólo un deseo me domina: ser rico. El jorobado
04. No podía ya detenerse en la pendiente por donde había empezado a deslizarse en su juventud. Fatalmente se veía impelido a proseguir en el camino del mal para encubrir sus malas acciones de otras épocas. Era una rica organización para ejercer el bien creado y, sin embargo, era máquina vigorosa en cuyo hogar bullían los gérmenes de todos los más odiosos y vituperables crímenes. El jorobado
05. -Yo sabré vengarme de ti si me engañas... Sírveme bien y serás recompensado. En caso contrario... El jorobado
06. Se dice de mí que no tengo más que una virtud: el olvido de las injurias. Esto es verdad. La idea de la venganza nace y muere en mi espíritu en el mismo minuto. Pero yo también, al saber la muerte de mi pobre amigo, hice un juramento; castigar al asesino. Entonces dirigía ya los destinos del Estado. Eso no será una venganza; será hacer justicia. El jorobado
07. El primer dinero es difícil de ganar, el segundo menos y el tercero se viene solo a las manos. El jorobado
08. ¡Qué dichosas son aquellas que tienen una compañera, una amiga a quien confiar los secretos de su alma, las penas y las venturas de su vida! Pero yo estoy siempre sola; no tengo nadie a quien abrir mi corazón. El jorobado
09. Sólo os pido el tiempo necesario para advertirla y prepararla. Es un alma tierna que una emoción demasiado fuerte podría destrozar. El jorobado
10. Ese hombre no se parece a los demás. Hay en él algo extraño y superior. Yo no he bajado los ojos sino delante de él...Dicen que hay mágicos prodigiosos y él debe ser uno de ellos. El jorobado
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La vampira (1865)

01. Soy tuyo como si mi corazón estuviera latiendo en tu pecho. La vampira
02. La vampira existió... ¿Era un monstruo fantástico como algunos creían firmemente o una audaz banda de ladrones reunidos bajo ese nombre? La vampira
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La ciudad vampiro (1867)

01. Las personas sin mucha cultura piensan que se puede uno deshacer de un vampiro cocinándolo, pero están equivocadas. La ciudad vampiro
02. No existe ningún país en el mundo donde se aplique tan generosamente como en Inglaterra la máxima de la libertad. A pesar de ello, dudo mucho que nuestras leyes permitan exhibir públicamente, en la pista de arena de un circo, a un vampiro que destroza los huesos y bebe la sangre de una joven inocente. Sería excesivo. La ciudad vampiro
03. El viaje fue horrible, y el simple hecho de recordarlo me hace estornudar. Todos los diablos del mar y del aire jugueteaban con nuestro barco como si fuese una pelota de goma. La ciudad vampiro
04. Cada vampiro es en sí mismo un grupo, representado generalmente por una forma concreta, pero que tiene además un número indefinido de posibles nuevas manifestaciones. La ciudad vampiro
05. Todo en aquel lugar era abrupto, confuso, tenebroso, desde la hierba de las praderas hasta las nubes del cielo. Las cimas de las montañas trepaban hasta las alturas con una rabia salvaje, y sólo más adelante podía divisarse una mezcla de torreones y almenas, de los que, por cientos de grietas, colgaban gigantescas cabelleras de lianas. Podían verse algunos pinos, creciendo entre los muros, y éstos parecían brotar a su vez de abismos insondables. La ciudad vampiro