01. (...) Es también la locura del amor: creer posible el reencuentro con la comunicación a la primera oportunidad entre un ser y otro.
02. Hay una apariencia propia de este mundo. A menudo hay sueños. A veces hay que retirar la sábana de la cama y descubrir los cuerpos que se aman.
03. Oír es ser tocado a distancia. El ritmo está ligado a la vibración. Por eso la música vuelve involuntariamente íntimos unos cuerpos yuxtapuestos.
04. Hay una edad en la que el hombre ya no se encuentra con la vida, sino con el tiempo. Ya no vemos vivir la vida. Vemos el tiempo que devora la vida cruda.
05. La experiencia de la tempestad es siempre abismal. En el intervalo entre el relámpago y el trueno, en cada ocasión tiembla el cuerpo, palpita el corazón.
06. La naturaleza de los sonidos es ser invisible, sin contornos precisos, con potencia para interpelar lo invisible o para hacerse mensajeros de los indelimitable.
07. Para los oídos, lo que retorna al alma es la significación del lenguaje (los niémata, las ideas, los fantasmas que la voz excita) y no la substancia de la palabra.
08. Un gran cementerio dorado. Es un inmenso jardín completamente abandonado. Tan abandonado como la naturaleza lo estaba antes de que el primer hombre apareciera en ella.
09. En el fondo del hombre hay una noche irresistible. Cada anochecer, los hombres y las mujeres se quedan dormidos. Se hunden en esa noche como si las tinieblas fuesen un recuerdo.
10. El coraje es una imprudencia que teme tanto como la prudencia puede temer, pero que coloca, sin embargo, su nariz fuera, abandona su matorral, se da vuelta, de pronto, y hace frente.
11. Las confidencias del amor no pueden ser confiadas al aire sin acarrear desastres. Deben ser reveladas solamente por escrito, no caer en oídos de nadie, disimularse a la naturaleza y a todas las clases de la sociedad.
12. Proporcionar un motivo destruye el amor. Dar un sentido a lo que se ama es mentir. Pues ningún ser humano experimenta otra alegría que no sea la sensación de estar vivo cuando esta sensación se vuelve intensa. Y no hay otra vida.