01. Detrás de la aventura siempre hay algo de conciencia.
02. La mayor potencia de la historieta está en su pobreza. Para hacer una, hacen falta solamente ideas, papeles y un lápiz.
03. Cuando empiezo una historia hago un casting mental donde escojo unos modelos para que ayuden al desarrollo de la historia.
04. (...) Al principio el modelo inspirador de la mujer guapa eran las actrices. Ahora encuentro la inspiración en la calle. No existen mujeres feas.
05. No tengo una idea clara de un lector. De hecho, sólo hago las cosas que a mí me gustan, esperando que mi trabajo también le guste a otras personas.
06. Cualquier elección política es también una elección cultural. Creo que la cosa más importante es la educación, preocuparse de saber, de conocer, de darse una propia cultura.
07. Me maravilla cómo un trazo, un signo, deviene un cuerpo igual que otro se convierte en un árbol. Es algo muy intelectual, es necesario emplear a fondo la imaginación para descifrarlo.
08. Todo pasa por la inteligencia. Sin seres inteligentes no hay seducción. La hermosura que se puede encontrar en un cuerpo tiene que ver con una forma de percibirlo, y eso ya es pensamiento.
09. El espectáculo ha acabado con el erotismo como camino para la liberación. Mi intención siempre ha sido mostrar los efectos sociales del erotismo, no los aspectos privados. De hecho, nunca he dibujado a dos personas haciendo el amor.
10. Creo que les debo algo a todos los dibujantes de cómic. Al principio me fijaba en todo el mundo. Con esto quiero decir que había muchos con los que no tenía nada en común en cuanto a lo estilístico, pero que me han influido en lo general.
11. [Sobre Jean Giraud, Moebius] Lo echo mucho en falta. Nos quedan sus obras. Siempre tengo un libro suyo abierto en la mesa de trabajo. Cuando acabo un dibujo, lo pongo entre sus páginas para ver si estoy a su altura, si mi dibujo tiene el mismo nivel, la misma dignidad.
12. Cuando yo era joven miraba en la calle la figura femenina. Me quedaba en los parques muchas horas con mi libreta, viéndolas pasar. Pues para mí, las mujeres en la calle son mucho más hermosas que las que aparecen en mis dibujos ¡Las mías son fantasías! ¡Las de la calle son reales!