Agricultor, escritor, biólogo y filósofo japonés creador del "método Fukuoka" o "agricultura natural" y ganador del prestigioso Premio Ramon Magsaysay en 1988.
Sobre Masanobu Fukuoka
Masanobu Fukuoka nace en el seno de una familia de agricultores dueña de extensas tierras cultivadas y su infancia transcurrió en la Prefectura de Gifu.
Terminada su educación inicial, asistió al "Gifu Prefecture Agricultural College", estudiando agricultura y microbiología y comenzando su carrera como científico investigador especializado en patología de plantas.
En 1934 Masanobu Fukuoka comenzó a trabajar como inspector en la Dirección General de Aduanas de Yokohama, prefectura de Kanagawa.
En 1937 fue hospitalizado por padecer neumonía, y mientras se recuperaba tuvo una profunda experiencia espiritual que transformó su visión del mundo y lo llevó a dudar de la ciencia agrícola tradicional.
Tras recuperarse, Masanobu Fukuoka renunció a su empleo y se trasladó a una granja que la familia tenía en la Isla de Shikoku (Japón meridional), para cultivar naranjas mikan orgánicas.
A partir de 1938 comenzó a practicar y experimentar con nuevas técnicas de cultivo, desarrollando el "método Fukuoka" o "agricultura natural" que se vio interrumpido durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
En 1940 Masanobu Fukuoka contrae matrimonio con Ayako y tras finalizar la Segunda Guerra, la familia pierde la mayor parte de sus tierras por la redistribución forzada llevada a cabo por el Comandante Supremo de las Fuerzas Aliadas, General Douglas MacArthur.
En 1947 publica su primer libro, "La revolución de Dios" y perfecciona la técnica de cultivo, llegando a ser ampliamente conocido en 1975 con la publicación de "La revolución de una brizna de paja".
A partir de 1979, Masanobu Fukuoka viaja por todos el mundo, dando conferencias sobre su técnica y recibiendo numerosas distinciones, entre ellas el Premio Ramon Magsaysay en 1988.
Masanobu Fukuoka desarrolló su método llamado "agricultura natural" a partir de la intuición de que gran parte de los trabajos que los seres humanos llevan a cabo son innecesarios, penosos y destructivos, dedicándose a buscar una fórmula por la cual no hubiera que agotar los recursos de la Tierra para producir alimentos de calidad en abundancia.
Los principios de trabajo de su método desarrollan la filosofía del no-hacer (Wu-Wei), o intervenir sólo hasta donde sea necesario, y lo mínimo posible, en los procesos naturales, para conseguir que la fuerza propia de la Naturaleza potencie los resultados en condiciones óptimas de salud y vitalidad