02. Lo que me interesa es la conquista del miedo, su ocultamiento y la huída de él, enfrentarse con el miedo, exorcizarlo, avergonzarse de él, por último, tener miedo de tener miedo.
04. Mi madre es restauradora, repara cosas rotas. Yo no hago eso. Yo destruyo cosas. No me muevo en una línea recta. Tengo que destruir, reconstruir y destruir de nuevo. Mi ritmo no es el mismo. Mi madre se movía en una línea recta: en cambio yo voy de un extremo al otro.
06. Para mí fue un suceso afortunado que el mercado de arte decidiera dejarme de lado, así pude trabajar a mi aire durante quince años. Tuve el privilegio de gozar de mi propia intimidad.
Artista y escultora francesa, cuyo trabajo más famoso es la escultura de la araña, llamada "Maman" (1999).
Sobre Louise Bourgeois
Nacida en pleno apogeo del cubismo, Louise Bourgeois era hija de un restaurador de antigüedades y de una empleada de la industria textil.
Tuvo una infancia traumática, con un padre que esperaba un hijo y que fue alistado durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918), por lo que ella sintió la ausencia del padre.
Terminada la guerra, con su padre de nuevo en casa, Louise Bourgeois estudió en La Sorbona (1926), donde se destacó en matemáticas y sus estudios de geometría contribuyeron a perfeccionar el estilo cubista que mostró en sus primeros años.
Tiempo después la madre enfermó y la artista la cuidó hasta su muerte, en 1932.
El padre contrató a una institutriz para que cuidara y educara a sus hijos y en poco tiempo se transformó en su amante, hecho que marco la vida de la artista y su obra, dándole un concepto y una forma de expresión novedosa y muy personal.
Louise Bourgeois estudió arte pintura en el Colegio de Louvre (École du Louvre) y en la Escuela de Bellas Artes (École des Beaux-Arts) y trabajó como asistente del pintor y escultor Fernand Léger.
En 1938 se trasladó a Nueva York con su esposo, el historiador Robert Goldwater, donde comenzó a cultivar la escultura.
Continúa estudiando en la escuela de arte de Nueva York (Art Students League of New York) y paulatinamente, desde finales de los años cuarenta, Louise Bourgeois abandonó la pintura y comenzó a realizar una serie de piezas totémicas en madera.
En 1982 el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA) le dedicaba una retrospectiva, siendo la primera mujer en tener ese reconocimiento.
La obra de Louise Bourgeois muestra una inmensa originalidad y una notable habilidad para trabajar con distintos materiales (madera, mármol, bronce, tejido).