01. Las ideas únicamente estéticas de la poesía son infinitas por extensión y libertad. La emoción estética resulta un sueño, un animismo de amor.
02. Y el rey colorado de barba de acero, su padre, la llama con queja amorosa; y un llanto de fiera, un llanto sincero se pierde en la duna de Islandia brumosa.
03. El ideal de la vida es inseparable del de la muerte. Debemos amar la vida para no temer la muerte, que es un pórtico de renovación; es decir: de nueva vida.
04. El ideal de la gloria, de la piedad y la ternura; la suprema virtud de humanidad, todo está en este amor, siempre lejano porque es infinito de belleza y bondad.
05. La música de la palabra es el complemento del canto, marca un colorido visible y atesora inflexiones para los seres y las cosas, para los matices del sentimiento y la forma.
06. El ángel de los sueños te ha besado para dejarte amor sentido y musical y cuyos sones de tristeza llegan al alma mía, como celestes miradas en esta niebla de profunda soledad.
07. Te siento en el encanto, te siento en la harmonía que tienen las nereidas de lánguida dulzura; bajo la luz plateada, cerca la mar sombría un sueño me pareces de indecible ventura.
08. Existen en las tinieblas frondales, fuerzas ocultas y entes graves, que laboran entre plantas delgadas de las pequeñas cámaras verdes de los sotos perdidos. Son los arcanos principios de vida, gestaciones ignotas.
09. El ideal es un primer motivo, un avance en el rumbo infinito, una esperanza intuyente. Náufraga en el torrente de la vida, la humanidad se incorpora, con la mirada en la altura, en el celaje alegre que engalana el deseo.
10. En el campo de la ética el individualismo es una desconexión aparente, pues, como se sabe, el primer movimiento para la acción colectiva es individual, surge de un egoísmo para convertirse en un amor, el primer ideal de la vida.
11. Hay una infinitud de ideales disímiles como las hojas. El ideal es lo íntimo del ser, lo que lo distingue de los otros seres. Ese átomo diferencial, único para cada individuo, es en el plano sentimental y estético la personalidad de arte y la inmortalidad individual, pues no existen, ni han existido dos seres de sentimentalidad idéntica desde el principio del mundo.
12. El bosque es una afirmación de la naturaleza y un elemento vital que aspira la humedad de la atmósfera y tiende sus frutos a todos los seres orgánicos. Alimenta desde el hombre hasta el cocón y la efímera, galvanizando los matices ocultos y descorriendo los poderes mágicos de la naturaleza campesina. Es una concentración harmónica de los valores primos de la naturaleza.