Frases de John Lanchester
- 1996. En deuda con el placer
- 2000. El señor Phillips
- 2002. El puerto de los aromas
- 2009. ¡Huy! Por qué todo el mundo debe a todo el mundo y nadie puede pagar
- 2012. Capital
- 2014. Cómo hablar de dinero
En deuda con el placer (1996)

01. El artista le dice al cosmos: lo único que pido es un amor infinito; ¿Es que eso está tan mal? Y el cosmos ni siquiera se molesta en responder. En deuda con el placer
02. Todo recuerdo implica cierto grado de pérdida; todos somos exilados de nuestro propio pasado, del mismo modo que, al levantar la vista de un libro, descubrimos de nuevo nuestro destierro del luminoso mundo de la imaginación y la fantasía. Un ferry que cruza el canal, con sus ceniceros rebosantes y sus niños vomitando, es un sitio tan bueno como otro cualquiera para reflexionar sobre el ángel que sostiene una espada llameante ante la puerta que se abre a todos nuestros ayeres. En deuda con el placer
03. Dicen que hay momentos determinados que constituyen la memoria colectiva de una generación: guerras, triunfos deportivos, asesinatos execrables, alunizajes...Al mismo tiempo, se supone que hay momentos que son los hitos de la vida de cada uno: las primeras experiencias sexuales, los accidentes de coche, las muertes de los parientes...Para una generación concreta de gente de determinada edad, la primera vez que vieron una televisión en color. Esa colonización brutal de la vida interior no me interesa nada, y supongo que tampoco a la mayoría de los auténticos artistas. Me interesan más las cosas que no puedo recordar: las ausencias, elisiones, vacuidades, negatividades, lagunas, aporías, la nada. En deuda con el placer
04. Como dice Confucio, en determinadas circunstancias se puede perdonar el asesinato; pero la irracionalidad no. En deuda con el placer
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El señor Phillips (2000)

01. A menudo, el deseo de los hombres de no ser ridículos es lo que los hace ridículos. El señor Phillips
02. Ha descubierto que existen muchos secretos en torno al sexo, secretos que superan con mucho a los que lo rodeaban cuando él, de joven, se hacía ilusiones al respecto: cuando el sexo era el país de las posibilidades, el territorio de las películas y la música pop, la cosa más prohibida y más excitante del mundo. El sexo en sí mismo constituía un secreto en el que te iniciabas de una vez y para siempre; y todo lo que le concernía tenía que ver con los secretos, algunos de los cuales no eran ciertos («una chica no puede quedarse embarazada a no ser que se corra», «si te pajeas demasiado, te quedas ciego») y otros, al final, sí (como que era lo mejor del mundo). Pero todos esos secretos no son nada comparados con el auténtico secreto, la verdad que nadie quiere contarte y que ni siquiera los adultos discuten o admiten, y que, como todos los secretos importantes, es sorprendente y radical y obvio: es decir, que nadie lo practica nunca. El señor Phillips
03. No todos los sueños son eróticos. Ni todas las mujeres, reales. El señor Phillips
04. El prever un día de duro trabajo siempre le hace sentirse como Supermán frente a un villano que empuña un trozo de criptonita. El señor Phillips
05. El sueño es una cuenta corriente en la que uno ingresa dinero cuando es joven y lo va sacando a medida que se hace mayor. El señor Phillips
06. Un tren, uno de esos trenes pequeños de pasajeros, sin gracia alguna, que parecen cajas, asoma por la curva a unos cuatrocientos metros de distancia y empieza a frenar al entrar en la estación. Los pasajeros que llenan el andén se congregan junto a las puertas, que se abren con una especie de resuello, y varias decenas de personas salen de los vagones rápidamente, fijándose en el hueco, antes de que otras doscientas entren en tropel. Al igual que muchos pasajeros habituales experimentados, el señor Phillips tiene toda una serie de técnicas para coger sitio: rodear a hurtadillas el lateral de la puerta y deslizarse sobre uno de los trasportines o apresurarse hasta alcanzar el extremo del vagón, abriéndose paso entre los grupos de pasajeros, maletines, periódicos y piernas extendidas. El señor Phillips
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El puerto de los aromas (2002)

01. El dinero no miente. No puede. La gente miente sobre él, pero eso es distinto. El puerto de los aromas
02. Me gusta que el Mar de la China Meridional sea tan cambiante. A veces el agua es azul y translúcida, y otras adquiere un color marrón sucio y turbulento. Hoy el mar era verdigris y estaba picado. Una tenue bruma difuminaba la vista de la isla de Hong Kong. El puerto de los aromas
03. La posición de la mujer en la sociedad tradicional china es de subordinación. El puerto de los aromas
04. Así que se puede describir Hong Kong de una forma totalmente contraria a la habitual: como un triunfo de la legislación, la planificación y la política socia. El puerto de los aromas
05. No te engañes con la pinta de los edificios; parecen bloques de apartamentos, pero muchos tienen dentro fábricas, restaurantes diminutos, burdeles, casas de juego, lo que tú quieras. Hasta talleres donde explotan a los empleados. Sí, sobre todo eso. El puerto de los aromas
06. Dios es amor. Pero a veces el amor puede ser terrible. El puerto de los aromas
07. Algunas cosas son universales y son iguales en todos los idiomas. A la gente la ha creado el mismo creador en todas partes y, por tanto, en lo esencial es muy parecida. El puerto de los aromas
08. El mayor obstáculo a la hora de aprender es el miedo. El puerto de los aromas
09. ¿Qué significaba, para un expatriado que intentaba salir adelante (para cualquier expatriado), haberse "adaptado" a Hong Kong? No es un sitio al que puedas "adaptarte". El puerto de los aromas
10. Un buen conejo tiene tres madrigueras. El puerto de los aromas
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¡Huy! Por qué todo el mundo debe a todo el mundo y nadie puede pagar (2009)

01. Los clientes depositan dinero en un banco por intereses; El banco presta ese dinero a otras personas a una tasa de interés más alta. ¡Huy! Por qué todo el mundo debe a todo el mundo y nadie puede pagar
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Capital (2012)

01. Un tumor cerebral no es una forma de cáncer. Pero usted tiene un tumor y lamento decirle que hay indicios de que está creciendo. Capital
02. Desde el punto de vista moral no es posible ser demasiado buenos; pero desde el punto de vista de la experiencia cotidiana, cuando seguimos nuestro camino y exigimos nuestra ración de las cosas buenas del mundo, hay una forma de ser buenos que no nos sirve. Capital
03. La persona que se preocupa por otra lo vive como una forma de amor; La persona objeto de la preocupación lo vive como una forma de control. Capital
04. Saber que uno se ha equivocado, y de qué manera, no era lo mismo que saber cómo rectificar. Capital
05. Tenía una sencilla máxima para todas las situaciones competitivas o de confrontación: averiguar qué es lo que menos espera la otra parte y hacerlo. Liberar emociones era bueno, pero la mejor maniobra era ponerle las cosas difíciles a la persona que quería ponértelas a ti. Capital
06. (...) Pero lo que había hecho que se enamorase de ella, enamorarse perdidamente, era que parecía una mujer serena, callada y triste. Rodeada por ruidosos banqueros que no paraban de exhibirse y por sus avasalladoras, avarientas, ansiosas o competitivas cónyuges, la joven parecía de otro mundo; De un mundo donde la gente cargaba con sus propias responsabilidades; Un mundo más grandioso, más real y más honorable. Capital
07. El bar estaba atestado a pesar de ser martes por la noche, aunque la verdad es que siempre estaba de bote en bote, como todo en aquella parte de la ciudad. Capital
08. Se oía decir a la gente que tener cuarenta años era como volver a los treinta, que tener cincuenta era como volver a tener cuarenta y que tener sesenta era como volver a los cuarenta y cinco, pero nadie decía que tener ochenta fuese volver a ninguna otra edad. Ochenta años eran ochenta años. Capital
09. Londres tenía mucha vida, era además muy verde y estaba llena de detalles: llena de materia forjada, comprada, situada, arreglada, formada, limpiada y expuesta, como si toda la ciudad estuviese en venta. Capital
10. Los humanos forjan su propia historia, pero no en circunstancias elegidas por ellos. Capital
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Cómo hablar de dinero (2014)

01. Medir el progreso es la única manera de lograr un éxito duradero. Cómo hablar de dinero
02. La psicología mira a la gente desde el interior. La economía los mira desde afuera. Cómo hablar de dinero