01. Centrarse en el hacer es, simplemente, ver el mundo como lucha.
02. El capital es un proceso de separar. Separa lo hecho del hacer, y por lo tanto separa a los hacedores de lo hecho y de su propio hacer.
03. El capitalismo es el reino de "así son las cosas", "así es la vida", "tú eres una mujer y las mujeres son así", "tú eres indígena y así son.
04. La lucha de ellos es para separar, la lucha de nosotros es para unificar. Nuestra lucha no es la lucha del contrapoder: es la lucha del antipoder
05. La lógica del capital es una lógica de mando, de jerarquía y de división. Es una lógica que reniega de la subjetividad. Es una lógica que objetiviza al sujeto.
06. En esta lucha revolucionaria no hay modelos, no hay recetas, simplemente una pregunta terriblemente urgente. No una pregunta vacía, sino una pregunta llena de mil respuestas.
07. Para comenzar a pensar en el poder y en cambiar el mundo sin tornar el poder (o, incluso, en otra cosa cualquiera), debemos partir desde el hacer. El hacer implica ser capaz de hacer.
08. La antipolítica es necesariamente experimental, ya que el movimiento del capital es un movimiento constante para imponer simetría, para institucionalizar e integrar las formas anticapitalistas de lucha.
09. La fuerza motora de la crisis es el impulso hacia la libertad, la fuga recíproca del capital y del antitrabajo, la repulsión mutua del capital y de la humanidad. El primer momento de la revolución es puramente negativo.
10. Nosotros somos el fuego, el capital es el bombero. En términos más tradicionales: la única fuerza de producción es la fuerza creativa del hacer humano, y las relaciones capitalistas de producción luchan todo el tiempo para contenerla.
11. Criticar es reconocer que somos seres divididos. Criticar la sociedad es criticar nuestra propia complicidad en la reproducción de esa sociedad. Comprender esto no debilita nuestro grito de ninguna manera. Por el contrario, lo intensifica, lo hace más urgente.
12. Si participamos en lo político sin cuestionar lo político como forma de actividad social, entonces, no importa qué tan progresivas sean nuestras políticas, estamos participando activamente en el proceso de separación que es el capital contra el cual supuestamente estamos luchando.