01. Cada deseo tiene su objeto adecuado. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
02. Es mejor amar algo que pueda corresponderte. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
03. El tiempo es una cosa extraña. Pesa más sobre quienes menos lo tienen. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
04. Un acertijo es un castillo en el aire, perfectamente habitable siempre y cuando no mires hacia abajo. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
05. En vez de fechas y grandes nombres, la historia se componía, para él, de libros e ideas. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
06. Si disparas con una pistola, la bala cae al suelo con la misma velocidad que sila sueltas con la mano. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
07. Ésa, creo, era la receta de nuestra relación. Nos dábamos lo que nunca esperábamos encontrar en el otro. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
08. La perfección es consecuencia natural de la eternidad: basta con esperar el tiempo suficiente y todo llega a realizar su potencial. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
09. Mi padre me enseñó algo más, y esto sin decir una palabra: nunca inviertas demasiado en algo cuyo fracaso te haría infeliz. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
10. En la vida de una persona es tan poco frecuente encontrar un gran amigo, que verte rodeado de tres al mismo tiempo es casi antinatural. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
11. La cronología es difícil de establecer, pero en algunos casos, los cuernos aparecen en la cabeza del infiel, no sólo de su pareja. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
12. Un buen amigo es aquel que se arriesga por ti cuando se lo pides, y un gran amigo el que no espera a que se lo pidas. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
13. Si en realidad el libro contenía un misterio, mi padre creía que sólo podría resolverse fuera de él: en diarios, cartas, documentos familiares. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
14. Puede que la Hypnerotomachia nunca haya tenido grandes atractivos físicos, pero contaba con todas las artimañas de las mujeres feas: el encanto, lento y adictivo, del misterio interior. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell
15. (...) Ambos vimos, en veinte minutos de conversación, algo que nos gustaba, una voluntad de no levantar muros, o de no dejar que los muros ya levantados se tuvieran en pie. "El enigma del cuatro" (2004), Ian Caldwell