01. Las ideas son más bien esferas que ideas. La inverosímil irrealidad de la realidad es patente, violenta; las reflexiones desoxidadas y veloces circulan como cuerpos astrales.
02. La mescalina me revelaba más sobre la locura de los demás que sobre la mía, y más sobre los síntomas que sobre el fondo.
03. Ser despojado de todo, haciendo transpirar nuestro propio corazón. Arrojado al desierto, obligado a reunir su ganado, un hueso por aquí, un diente por allá, a lo lejos un cuerno. Eso es para nosotros.
04. Las filosofías occidentales hacen perder el pelo y acortan la vida. La filosofía oriental hace crecer el pelo y prolonga la vida.
05. No supiste jugar. Atrapaste las cuerdas. Pero no supiste tocar. Lo destrozaste todo enseguida. Rompiste el violín. Arrojaste una llama sobre la piel de seda para formar un horrible pantano de sangre.
06. Como fantasmas delicados que no ha evocado el deseo. El chino ama ante todo los horizontes lejanos, aquello que no se puede alcanzar.
07. Escribo con el fin de dar a conocer una persona que, viéndome, nadie habría podido sospechar jamás que existiera.
08. Yo estaba en pleno océano. Navegábamos. De repente, el viento cesó. Entonces el océano reveló su grandeza, su interminable soledad.
09. No más cansancio. Arco iris de maravillas. La primavera es tan hermosa; la mañana piensa en todas partes. ¿Es posible? ¿Es cierto? Una capa, una invisible capa hizo desaparecer el mal, el inquietante, el interminable mal.
10. Las olas del océano mescaliniano se habían precipitado sobre ml, atropellándome, derribándome como si yo fuera arenilla.
11. En el mundo entero uno puede entenderse por señas. En la India, imposible.
12. Hay que ver el Taj Mahal en Agra. A su lado, Notre Dame de París es un bloque de materiales inmundos, buenos para echarlos al Sena, o a un pozo cualquiera, como todos los otros monumentos (salvo quizás el Partenón y algunas pagodas).