01. La indignación moral no es más que envidia con aureola.
02. No frecuentes las malas compañías, no sea que aumente su número.
03. En todas las tierras el sol sale al amanecer.
04. Ama a tu vecino, pero no derribes vuestra verja.
01. La indignación moral no es más que envidia con aureola.
02. No frecuentes las malas compañías, no sea que aumente su número.
03. En todas las tierras el sol sale al amanecer.
04. Ama a tu vecino, pero no derribes vuestra verja.
Poeta, orador y sacerdote inglés, cuya obra literaria ha ganado en reconocimiento con el paso de los siglos.
George Herbert nació en una familia de artistas, con buena posición social, recibiendo una educación que le permitió obtener posiciones prominentes en la Universidad de Cambridge y en el parlamento.
Más tarde se convirtió en sacerdote.
Los poemas de sus últimos años, escritos siendo George Herbert clérigo en Benerton, cerca de Salisbury, son considerados extraordinarios; caracterizados por la precisión del lenguaje, la versatilidad en su métrica y el ingenioso uso de imágenes, características de la poesía metafísica.
Su poesía se publicó bajo el título de "El templo" (1633).
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