01. ¡Todas las cosas son trágicas cuando una madre nos ve!
02. Incluso en prosa, soy un verdadero poeta. Mi poema está terminado antes de que lo empiece.
03. Si no apareces en todo el día, todos piensan que estás perezoso o muerto.
04. Y no se preocupe por su linaje poético o natural.
05. ¡Y aquí yo soy el centro de toda la belleza! ¡Escribiendo estos poemas! ¡Imagina!
06. ¿Habré de volverme dispendioso como si fuera rubio? ¿O religioso como si fuera francés?
07. ¿Por qué habría de compartirte? ¿Por qué no tú te deshaces del otro para variar?
08. Soy el menos complicado de los hombres. Todo lo que quiero es amor sin límites.
09. Gobernaré los sueños, despertaré a los muertos y usurparé al demonio su voluntad.
10. No te quejes, querido, tú haces lo que yo solo puedo nombrar.
11. (...) Y siempre abrazar, gente, tierra, cielo, estrellas, como yo, libremente.
12. Sin embargo, nunca me he atascado con los elogios de la vida pastoral, ni con la nostalgia de un pasado inocente de actos pervertidos en el pasto. No. Nunca hace falta salir de los confines de Nueva York para que uno cumpla sus deseos verdes –ni siquiera puedo disfrutar de una hoja de hierba a menos que sepa que hay un tren subterráneo cerca, o una tienda de discos o alguna otra señal de que la gente no se arrepiente totalmente de su vida. Lo más importante es afirmar lo menos sincero; las nubes reciben suficiente atención como están las cosas e incluso ellas siguen pasando de largo. ¿Sabrán de lo que se están perdiendo?