01. Si la Viena moderna imita al París del varón Haussmann, con sus grande boulevards, Budapest imita a su vez este urbanismo vienés de acarreo, es la mímesis de una mímesis.
02. La identidad es una búsqueda siempre abierta e incluso la obsesiva defensa de los orígenes puede ser en ocasiones una esclavitud tan regresiva como, en otras circunstancias, cómplice rendición al desarraigo.
03. Tragedias y malos tragos se sitúan a un mismo nivel, porque la auténtica tragedia de la vida es que toda ella no es más que un mal trago.
04. Al corazón no se le dan órdenes, decía, el corazón se rompe, y si se le dice que no se rompa se rompe igualmente, como el mío...
05. En la escuela aprendí a reírme y sobre todo me enseñaron una gran cosa: a reírme de aquello que respetaba y a respetar aquello de lo que me reía.
06. Vive y deja vivir, es la sabiduría vienesa, tolerancia liberal que puede convertirse en cínica indiferencia, como decía Alfred Polgar, en el "muere y deja morir".
07. Sabías que la poesía no es jamás sólo tuya, como el amor, sino de todos; no es el poeta el que crea las palabras, decías y declamabas, es la palabra la que se le hecha encima y le hace poeta...
08. Es posible que todo viaje se dirija hacia su origen, a la búsqueda de su propio rostro (...). El viajero escapa de las constricciones de la realidad, que le aprisiona en la repetición, y busca la libertad y el futuro, o mejor dicho las posibilidades de un futuro todavía abierto y todavía por elegir y por tanto la infancia, la casa natal, en la cual la vida aún está por delante.
09. (...) Los hombres emigraban, iban a excavar minas o construir carreteras o vías de ferrocarril en Francia o en Siberia, y las mujeres, con los canastos a la espalda llenos de cucharas y cazos de madera, se dirigían a pie de un pueblo a otro para vender sus cosas de casa en casa, durmiendo en las hondonadas o en los heniles, pero la meta del viaje era para todos, cada vez, su breve regreso.
10. La ideología es importante porque empuja a buscar el sentido, pero está equivocada y no se lo da. La búsqueda del sentido es muy fuerte, y éste es el aspecto positivo. La ideología es, sin embargo, el barco que se hunde. Pero el viaje sigue siendo verdadero. Es como viajar por el mar en busca del sentido de la vida y de la historia, en un barco que no puede llegar.
11. Mengele, en ese momento, está fascinado por la transgresión, la ejerce como una especie de culto, piensa que ilumina la vida cotidiana con una luz superior. Los actos que realiza son, además de atroces, de una extrema estupidez, son actos que todos podrían realizar y que él, en su ignorancia deslumbrada por el Kitsch, piensa en cambio que son acciones reservadas a unos pocos elegidos.
12. La poesía es impersonal, sopla donde y cuando quiere al igual que el viento, no pertenece al nombre que hay escrito a su pie. Nace en ocasiones de la mano como algunas figuras trazadas distraídamente sobre el papel, que al final resultan encantadoras, o como algunos gestos, mediante los cuales una persona manifiesta, sin darse cuenta, una gracia que no sabe que tiene y que tal vez nunca volverá a tener.