01. Es condición indispensable, para que el proletariado pueda cumplir su misión histórica, que se organice en partido de clase, independiente de los demás y con una política independiente de clase.
02. (...) La lección ha sido provechosa. No estamos ni abatidos, ni desmoralizados. La alarma y la inquietud de las clases dominantes son su mejor prueba. De la derrota de hoy surgirá la victoria de mañana.
03. La lucha por el derecho de los pueblos a la independencia no presupone la disgregación de los obreros de las diversas naciones que forman el Estado mediante la existencia de organizaciones independientes.
04. ¿Por qué los gobiernos no gobiernan? Eso es lo que hay que preguntar. Sólo el gobierno de la clase trabajadora será un gobierno fuerte. (...) Los gobiernos no gobiernan porque no responden al anhelo de las masas.
05. Los movimientos de emancipación nacional son un fenómeno propio de la sociedad capitalista, por cuanto el fundamento económico de la nación es el desarrollo del intercambio sobre la base de la economía capitalista.
06. El proletariado es la clase social llamada a realizar lo que no son capaces de hacer ni la gran burguesía ni la pequeña: la revolución democrático-burguesa. Sólo él, pues, puede resolver radicalmente el problema nacional.
07. El Estado sirve para oprimir a alguien. Cuando la burguesía haya dejado de existir, el Estado desaparecerá por sí solo porque no será necesario. El gobierno de los hombres será sustituido por la administración de las cosas.
08. La clase obrera, en la lucha por su emancipación, se lanza no solamente contra la fuerza económica de la clase enemiga, sino también contra su fuerza política. La conquista del poder político, es la condición indispensable de la transformación socialista.
09. Nacionalismo y socialismo son dos términos antitéticos al parecer, pero cuyos fines se confunden y se complementan recíprocamente, existiendo entre ambos una íntima e indestructible conexión. Uno y otro amenazan los cimientos mismos de la sociedad actual. Ninguna doctrina tan revolucionaria como ellas.
10. Desde el punto de vista de la democracia en general, el reconocimiento del derecho a la separación disminuye los peligros de la disgregación del estado. En general, los pueblos no se deciden a la separación más que cuando la opresión nacional hace insoportable la propia existencia y dificulta las relaciones económicas.
11. La nación, en el verdadero sentido de la palabra, es un producto directo de la sociedad capitalista, por cuanto surge y se desarrolla allí donde surge y se desarrolla el capitalismo. La nación se caracteriza por la existencia de relaciones económicas capitalistas determinadas, la comunidad de territorio, de idioma y de cultura.
12. Para llevar a cabo con éxito un movimiento revolucionario, es indispensable seguir un plan preconcebido, con ligeras variantes adaptadas a las circunstancias del lugar. De lo contrario, se corre el peligro no sólo de no alcanzar el objetivo propuesto, sino que al realizar actos sin ningún objetivo o poco preciso, pueda desvanecerse fácilmente el camino que conduce a la victoria.