01. ¡Cuán bella y caprichosa es la alegría!
02. Bajo el hacha implacable, ¡cuán presto en tierra cayeron encinas y robles!
03. Alma que vas huyendo de ti misma, ¿qué buscas, insensata, en las demás?
04. ¿Por qué tan terca, tan fiel memoria me ha dado el cielo?
05. No subas tan alto, pensamiento loco, que el que más alto sube más hondo cae.
06. Cual si en suelo extranjero me hallase, tímida y hosca, contemplo desde lejos los bosques y alturas y los floridos senderos donde en cada rincón me aguardaba la esperanza sonriendo.
07. Los que ayer fueron bosques y selvas de agreste espesura, donde envueltas en dulce misterio al rayar el día flotaban las brumas, y brotaba la fuente serena entre flores y musgos oculta, hoy son áridas lomas que ostentan deformes y negras sus hondas cisuras.