01. Las pinturas que estaban colgadas de los muros del entresuelo no se parecían en nada a lo que había visto o soñado hasta entonces. ¿Dónde estaba la pintura lisa, la sobriedad sentimental, y el tinte oscuro que Europa había admirado en sus pinturas durante siglos enteros? Aquí los cuadros parecían estar bañados en sol y llenos de vida exuberante. Había grupos de coristas pintadas audazmente con rojos primarios, verdes y azules, colocados irreverentemente unos al lado de los otros. Miró la firma y leyó: Degas.
02. Usted es un "gran nervioso", Vincent -le había dicho doctor Rey un día-. Nunca ha sido del todo normal. Es verdad que ningún artista lo es, de lo contrario no podría pintar. Los hombres normales no crean obras de arte. Comen, duermen, trabajan en forma rutinaria y mueren. Ustedes son hipersensitivos a la vida y a la naturaleza, es por eso que son capaces de interpretar lo que nosotros no podemos. Pero si no tienen cuidado esa hipersensibilidad los llevará a la destrucción.